Con ocasión del Día del Periodista en Guatemala, Reporteros sin Fronteras le incita a hacer una declaración en la que condene firmemente los ataques contra los periodistas, incluyendo las violaciones a la libertad de información cometidas por las autoridades y las fuerzas del orden.
Este carta fue publicado originalmente en rsf.org el 28 de noviembre de 2014.
Otto Pérez Molina
Presidente de la República de Guatemala
París, 28 de noviembre de 2014
Señor Presidente de la República,
Con ocasión del Día del Periodista en Guatemala, Reporteros sin Fronteras, organización internacional de defensa de la libertad de información, desea expresarle su profunda preocupación por la situación de los periodistas en su país.
Guatemala, que se encuentra en el lugar 125, entre 180 países, en la edición 2014 de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras, sigue siendo un país muy peligroso para el gremio periodístico. El Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (Cerigua) ha registrado 143 violaciones a la libertad de prensa desde el inicio de su mandato presidencial; éstas incluyen presiones, amenazas, intimidaciones, agresiones y asesinatos de periodistas y colaboradores de los medios de comunicación. También es muy preocupante que el sistema judicial se utilice cada vez más, incluso por las cúpulas del Estado, para perseguir a los periodistas y a los medios de comunicación. Reporteros sin Fronteras se inquietó por los procesos judiciales abusivos que enfrentan el director del diario El Periódico, José Rubén Zamora (desde noviembre de 2013) y la revista Contrapoder (en marzo pasado).
Estos ataques, que se han incrementado desde el año pasado –según el número de denuncias que recibe el Ministerio Público–, se multiplican en medio de un clima de casi total impunidad. Según Cerigua, de los 24 casos de asesinato de periodistas registrados desde el año 2000 –cuatro de ellos cometidos en 2013–, sólo una investigación ha dado como resultado una sentencia. Esta impunidad genera autocensura, muy perjudicial para la actividad periodística, sobre todo a escala local, donde el crimen organizado está bien implantado. Numerosos periodistas limitan sus investigaciones sobre temas delicados, como el crimen organizado o la corrupción de los funcionarios públicos, por miedo a represalias violentas.
Los profesionales de los medios de comunicación se sienten aún más vulnerables porque con frecuencia son víctimas de quienes supuestamente deberían garantizar su seguridad: las autoridades y las fuerzas del orden. Así, no se trata simplemente de denunciar las agresiones cometidas por el crimen organizado, sino de emprender una política clara y eficaz a fin de garantizar la seguridad de los periodistas. En este contexto, celebramos el compromiso que adquirió voluntariamente Guatemala en su segundo Examen Periódico Universal, en diciembre de 2012, de crear un programa de protección de periodistas. Es imperativo que éste funcione debidamente lo antes posible.
Por otra parte, Reporteros sin Fronteras expresa su preocupación por la fuerte concentración del paisaje mediático, perjudicial para el pluralismo. La legislación en vigor desfavorece a los medios de comunicación comunitarios, en beneficio de los medios de comunicación establecidos. Así, la reforma a la Ley General de Telecomunicaciones de 2011 permitió a los medios de comunicación que ya poseían frecuencias audiovisuales renovar sus licencias, pero olvidó regularizar la situación de los medios de comunicación comunitarios. Estos últimos se encuentran en una situación vulnerable puesto que corren el riesgo de ser cerrados en cualquier momento debido a que carecen de un estatus legal. En junio pasado dos radios comunitarias del departamento de Quiché, Estéreo Luz y La voz de Sonora, se vieron obligadas a cerrar después de violentos allanamientos.
Con ocasión del Día del Periodista en Guatemala, Reporteros sin Fronteras le incita a hacer una declaración en la que condene firmemente los ataques contra los periodistas, incluyendo las violaciones a la libertad de información cometidas por las autoridades y las fuerzas del orden. Esta declaración será aún más importante dado que 2015 será un año electoral y, por ello, particularmente de riesgo para el gremio periodístico.
Asimismo, lo exhortamos a llevar a cabo investigaciones independientes y a profundidad para que los autores de los ataques a periodistas y a colaboradores de los medios de comunicación rindan cuentas ante la justicia, así como para acelerar la puesta en marcha del programa de protección de periodistas.
Agradeciendo su atención a nuestra solicitud, le envío Señor Presidente de la República, mis saludos más cordiales.
Atentamente,
Christophe Deloire Secretario General de Reporteros sin Fronteras