Mientras la censura, detención, encarcelamiento y acciones legales contra periodistas en China son una noticias familiar, han surgido nuevos peligros a medida que los medios del país se orientan más al mercado: ataques violentos de personas o grupos implicados en los informes de periodistas sobre corrupción y crimen. Este es el más importante hallazgo de […]
Mientras la censura, detención, encarcelamiento y acciones legales contra periodistas en China son una noticias familiar, han surgido nuevos peligros a medida que los medios del país se orientan más al mercado: ataques violentos de personas o grupos implicados en los informes de periodistas sobre corrupción y crimen.
Este es el más importante hallazgo de un nuevo informe del Committee to Protect Journalists (Comité por la Protección de los Periodistas, CPJ), a partir de entrevistas con más de 20 periodistas en China y en investigación a lo largo del año pasado. «New Journalism and New Threats» (Nuevo periodismo y nuevas amenazas) documenta la situación cambiante en que se encuentran los periodistas a medida avanza con la liberalización económica.
La eliminación de subsidios estatales a los medios ha obligado a periódicos y revistas a reorientar sus estrategias editoriales para aumentar el número de lectores y obtener publicidad, escribe la autora Sophie Beach. «La inversión privada en los medios está cada vez más difundida, y varios periódicos oficiales importantes han lanzado diarios tipo tabloide o ediciones de fin de semana, con frecuencia con ingresos por publicidad privada».
Esto ha dado a un número en aumento de publicaciones un cierto grado de independencia, con editores que instan a periodistas a informar más dinámicamente sobre temas como crimen, corrupción, represión policial y desastres causados por la naturaleza y el hombre.
Sin embargo, los periodistas que informan de corrupción y crímenes están siendo cada vez más atacados. Beach dice que las organizaciones gremiales de periodista del país han recibido centenares de informes de agresiones o amenazas, y algunas empresas de seguros indican al periodismo como la tercera profesión más peligrosa en China. Un sistema judicial débil y la renuencia de las autoridades centrales a defender eficazmente el derecho de los periodistas a la libre expresión implica que los reporteros tienen pocas rutas de defensa contra esos ataques.
Lea el informe completo en:
http://www.cpj.org/Briefings/2004/China_8_04/China_8_04.html
Para obtener la información más reciente sobre la libertad de expresión en China, visite:
– IFEX: http://ifex.org/en/content/view/full/147/
– Human Rights Watch: http://www.hrw.org/doc?t=asia&c=china
– Derechos humanos en China: http://iso.hrichina.org/iso/
– Nota del Washington Post sobre un editor en una cruzada: http://www.msnbc.msn.com/id/5569819/print/1/displaymode/1098