(CEPET/IFEX) – México, 27 de octubre, 2008. Representantes del gremio periodístico del estado de Colima, al centro de México, consideraron que la iniciativa de ley sobre «Protección a los Periodistas» que se analiza en el Congreso local podría constituirse en factor de censura y control de la labor informativa. La iniciativa, presentada por el PAN, […]
(CEPET/IFEX) – México, 27 de octubre, 2008. Representantes del gremio periodístico del estado de Colima, al centro de México, consideraron que la iniciativa de ley sobre «Protección a los Periodistas» que se analiza en el Congreso local podría constituirse en factor de censura y control de la labor informativa.
La iniciativa, presentada por el PAN, partido en el poder, abarca cláusulas en torno a temas como: la libre expresión e información en el marco de la definición editorial de su empresa; la cláusula de conciencia; el secreto profesional; el libre y preferente acceso a las fuentes informativas; la libertad de creación y los derechos de autor además de la participación en la orientación editorial.
Durante un foro realizado el viernes 24 de octubre en la sala de juntas del Congreso local de Colima, líderes de organizaciones manifestaron que la iniciativa presenta deficiencias y contradicciones al no especificar sanciones, no brindar apoyos suficientes a los trabajadores y no estipular claramente cuál sería la relación entre las empresas y los llamados consejos de la comunicación, que contempla dicha ley.
De acuerdo a la información publicada por la Agencia Proceso (APRO), la mayoría de los 14 representantes de organizaciones presentes en el foro manifestaron la necesidad de elaborar un nuevo proyecto que tome en cuenta los planteamientos de los propios trabajadores de los medios.
En declaraciones a APRO, Juan Ramón Negrete Jiménez, miembro de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos (Fapermex), opinó que la idea de crear consejos de la comunicación, que se encargarían del autocontrol y regulación ética de los medios, trata más bien, de «abrir las puertas a organismos externos ajenos al periodismo para que se entrometan en la vida interna de los medios».
La corresponsal del diario «La Jornada» mira positivo que esta iniciativa recupere la cláusula de conciencia y el secreto profesional, pero destacó que falla al no establecer el monto de la indemnización si un reportero exige su liquidación por no estar de acuerdo con un cambio repentino en la línea editorial, donde tampoco queda claro si el secreto profesional es un derecho o un deber.