Andrei Bastunets, presidente de la Asociación de Periodistas de Bielorrusia, explica por qué las recientes enmiendas a la Ley de Medios tornan casi imposible que los periodistas puedan hacer su trabajo.
No es ningún secreto que, en el mundo cada vez más competitivo del periodismo, los que la tienen más difícil son los trabajadores independientes. Muchos no cuentan con un sueldo estable, otros tienen dificultades para acceder a fuentes sin el respaldo de los principales medios, y muchos no tienen protección legal por parte de empleadores si se enfrentan a juicios por libelo o difamación.
Pero para los trabajadores independientes en Bielorrusia, estos reveses parecen ser mínimos en comparación con la Ley de Medios que esencialmente les prohíbe ejercer el periodismo. El 20 de diciembre 2014, el Presidente Aleksandr Lukashenko aprobó un conjunto de enmiendas imprecisas y generales a esta ley. A partir del 1ro de enero de 2015, estas enmiendas extienden las restricciones sobre la prensa tradicional a los medios de comunicación en línea, por lo que para el gobierno es más fácil cerrar sitios, y tornan casi imposible para los periodistas el poder hacer su trabajo en Bielorrusia.
En abril de 2015, hablé con Andrei Bastunets, el presidente de la Asociación de Periodistas de Bielorrusia (BAJ por su sigla en inglés) – una organización miembro de IFEX – acerca de cómo estos recientes acontecimientos están afectando el periodismo y el acceso a la información en Bielorrusia.
Bastunets, que fue elegido presidente de BAJ el mes pasado, es escritor y graduado de la Facultad de Derecho de la Universidad Estatal de Bielorrusia. En el período 1998-2000, fue vicepresidente de Femida Nova, hasta que el periódico dejó de publicarse. En 1998, Bastunets también comenzó a trabajar para BAJ. Además de su actual cargo como presidente de la asociación, Bastunets es un jurista que dirige el Centro de Apoyo Legal de Periodistas de BAJ – un centro que ofrece servicios de litigio civil para miembros de BAJ. Bastunets también escribe poemas y compone música.
Caro Rolando: ¿Cómo resumiría el panorama actual de libertad de expresión en Bielorrusia?
Andrei Bastunets: La situación de la libertad de expresión está cada vez peor. Después de establecer el control sobre los medios tradicionales – y el control casi total sobre la televisión – las autoridades están tratando de ampliar su control sobre Internet y la edición de libros, a nivel legislativo.
En cuanto a la aplicación de la ley, el ambiente para los periodistas también se ha deteriorado. Los periodistas independientes se enfrentan a responsabilidades administrativas por cooperar con los medios extranjeros sin acreditación. En 2015, 12 periodistas han sido multados y dos están en espera de juicio. Desde el 2014, que fue cuando se impusieron este tipo de multas por primera vez, tenemos un total de 22 multas por un valor de casi 100 millones de rublos, lo que equivale a casi $ 7,000 USD. A finales de 2014, más de 10 recursos de información fueron bloqueados durante algún tiempo sin motivos legales para hacerlo.
CR: En diciembre de 2014, el presidente Alexander Lukashenko aprobó la ley «Sobre la introducción de enmiendas a la Ley de Medios de la República de Bielorrusia.» ¿Qué preocupaciones aporta esta ley para los periodistas en Bielorrusia?
AB: Las enmiendas a la Ley de Medios regulan duramente el orden de distribución de la información en Internet. Las definiciones de la ley son imprecisas y dejan espacio para una aplicación arbitraria.
La mayor amenaza para los periodistas es la posibilidad de que las autoridades bloqueen medios en línea sin decisiones judiciales, por decisión del Ministerio de Información. Sin una definición clara de cuáles sitios web son legales, las autoridades podrían utilizar sus normas contra todos los recursos de Internet, independientemente del hecho de que sean medios de comunicación en los países de su ubicación. No sólo los sitios web de Bielorrusia pueden ser bloqueados; también se pueden bloquear sitios web de cualquier lugar, incluso por una sola violación de la ley.
CR: ¿Por qué cree que el gobierno adoptó una ley tan dura?
AB: El deterioro de la situación económica aquí podría fortalecer la insatisfacción pública con las autoridades. Además, habrá elecciones presidenciales este año. Las elecciones suelen ir acompañadas por un aumento en el control sobre los medios de comunicación.
CR: ¿Qué tipo de informes está tratando de suprimir el gobierno?
AB: Tradicionalmente, el gobierno obstaculiza la difusión de información sobre la corrupción entre las autoridades, las relaciones entre las élites gobernantes, así como la cobertura de la situación en el país durante la crisis económica.
CR: ¿Cómo la censura web ha afectado el acceso a la información en Bielorrusia?
AB: Mientras que antes el gobierno podía de vez en cuando restringir ilegalmente el acceso a ciertos sitios – sin admitir al bloqueo – ahora tiene la posibilidad legal de bloquear sitios «inaceptables» sin sanciones judiciales. A partir de 2016, de conformidad con el Decreto Presidencial N°6 «sobre las medidas urgentes para combatir el tráfico de drogas ilegales», los proveedores de Internet estarán obligados a recoger y almacenar información acerca de los sitios web visitados por los usuarios de Internet, creando la posibilidad de un control total sobre los mismos.
CR: ¿Qué puede hacer la comunidad internacional para apoyar la libertad de expresión en Bielorrusia?
AB: Es importante que los problemas de la libertad de expresión en Bielorrusia no caigan fuera del radar de las organizaciones internacionales periodísticas y de derechos humanos. Las Apelaciones por parte de organizaciones internacionales a los órganos del Estado – a pesar de no tener un efecto evidente – sirven como un recordatorio constante de que las normas internacionales de derechos humanos son violadas. Demuestran que la comunidad internacional presta atención a estas violaciones, y esto a menudo impide violaciones similares en el futuro. Para los periodistas sujetos a la presión de las autoridades, la solidaridad y el apoyo de los colegas y de las organizaciones de periodismo son muy importantes.
En una foto del 2013, vemos a Andrei Bastunets, presidente de la Asociación de Periodistas de Bielorrusia y Zhanna Litvina, miembro del consejo de la misma entidad.Belarusian Association of Journalists
Caro Rolando es editora de IFEX para la sección África, Europa y Asia central.