"Los periodistas tienen derecho a hacer su trabajo informando sobre esta guerra, y todos tenemos derecho a saber lo que está ocurriendo en Gaza."
Este artículo fue publicado originalmente en rsf.org el 3 de octubre de 2024.
Periodistas atacados y asesinados, redacciones destruidas, Internet y electricidad cortadas, prensa extranjera bloqueada: desde el comienzo de la guerra en Gaza, las fuerzas israelíes han destruido metódicamente la infraestructura de los medios de comunicación del territorio palestino y han asfixiado al periodismo. Reporteros Sin Fronteras (RSF) se solidariza con los periodistas de Gaza y reitera su llamamiento urgente a la comunidad internacional para que les proteja.
Desde que cayeron las primeras bombas sobre Gaza, en la mañana del 7 de octubre de 2023, tras el sangriento ataque de Hamás contra Israel, el derecho a la información sobre lo que ocurre en el territorio palestino no ha dejado de erosionarse cada día que pasa, mientras continúa el apagón mediático del ejército israelí.
En un año, más de 130 periodistas palestinos han sido asesinados por las fuerzas israelíes en Gaza. Según la información de RSF, al menos 32 de ellos fueron atacados y asesinados mientras trabajaban. Casi todos los periodistas de este territorio sitiado se han desplazado varias veces en el último año, y los pocos que se han visto obligados a exiliarse no tienen perspectivas de regresar. Mientras tanto, las autoridades israelíes siguen bloqueando el acceso a Gaza a los periodistas extranjeros. Los pocos reporteros a los que se ha permitido entrar en Gaza desde el exterior sólo han podido hacerlo bajo la estricta vigilancia del ejército israelí.
La represión no termina ahí: se han destruido oficinas de prensa; reporteros han sido detenidos y torturados, según la información de RSF; y con frecuencia se cortan Internet y la electricidad. Los periodistas que siguen trabajando contra viento y marea en este territorio sitiado son a menudo víctimas de campañas de propaganda que cuestionan su integridad, acusándolos de colaborar con combatientes o de haber participado en los atentados del 7 de octubre.
Estas flagrantes violaciones de la libertad de prensa han quedado en la impunidad generalizada. A pesar de las cuatro denuncias que RSF presentó ante la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra contra periodistas en Gaza, y de las garantías que la fiscalía de la CPI dio a RSF en enero, los responsables siguen sin comparecer ante la justicia, y los crímenes continúan.
«Un año entero de guerra ha significado un año de violencia sin precedentes contra los periodistas, con la prensa de Gaza diezmada y los periodistas extranjeros aún con la entrada prohibida en la franja. Las fuerzas israelíes han hecho todo lo posible por impedir la cobertura de lo que está ocurriendo en Gaza y han atacado sistemáticamente a periodistas que han corrido enormes riesgos para hacer su trabajo. Esto, a su vez, ha repercutido en el acceso del público mundial a la información sobre la guerra, que en su inmensa mayoría es de interés público. Los periodistas tienen derecho a hacer su trabajo informando sobre esta guerra, y todos tenemos derecho a saber lo que está ocurriendo en Gaza. RSF pide en los términos más enérgicos posibles el cese inmediato de la violencia contra los periodistas en Gaza, acciones concretas para poner fin a la impunidad de los ataques ya perpetrados , y que se abra sin demora el acceso a los periodistas extranjeros».
Rebecca Vincent, Directora de Campañas de RSF
Represión más allá de Gaza
Periodistas en otras partes de Palestina también han sido objeto de violenta represión en el último año, bajo la sombra de la guerra en Gaza. Desde el 7 de octubre, decenas de periodistas de Cisjordania han sido detenidos y permanecen en cárceles israelíes. La sede de Al-Jazeera en Ramala fue clausurada por soldados armados el pasado septiembre, acusada de propaganda. Una ley aprobada por el parlamento israelí en noviembre de 2023 justificó la prohibición del canal de Al Jazeera en Israel, que entró en vigor el 14 de junio de 2024. Esta censura también afecta a otros medios de comunicación: el 21 de mayo, el ejército israelí confiscó una cámara de la agencia de noticias Associated Press y cortó durante varias horas sus transmisiones continuas de Gaza, con el pretexto de que esas imágenes eran suministradas a Al Jazeera, entre otros medios. Los reporteros israelíes que critican la guerra en Gaza y la política del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu también han sido víctimas de represión, intimidación y violencia policial desde el 7 de octubre de 2023.
La guerra en Gaza se extiende a los países de la región: en Líbano, tres periodistas fueron asesinados por el ejército israelí mientras trabajaban, según informaciones de RSF. A pesar de que seis investigaciones, incluida una de RSF, demuestran que el fotoperiodista de Reuters Issam Abdallah, fue blanco de las fuerzas israelíes el 13 de octubre de 2023, ninguna autoridad ha sido responsabilizada por este crimen hasta la fecha. Un año después, la guerra se ha intensificado y los periodistas libaneses también corren el riesgo de ser víctimas de masacres, ya que muchos de ellos se han visto obligados a evacuar sus hogares y sus lugares de trabajo en zonas cada vez más peligrosas. En previsión de la crisis, RSF abrió en marzo de 2024 un centro regional de libertad de prensa en Beirut para ayudar a equipar y proteger a los periodistas de la región.