La víspera de que comience el juicio contra el representante de RSF en Turquía, Erol Önderoğlu, y sus dos coacusados, Şebnem Korur Fincancı y Ahmet Nesin, 17 organizaciones de defensa de la libertad de prensa y los derechos humanos hacen un llamado al gobierno turco para que retire todos los cargos y ponga fin a cualquier forma de represión contra periodistas, escritores y académicos.
La víspera de que comience el juicio contra el representante de RSF en Turquía, Erol Önderoğlu, 17 organizaciones de defensa de la libertad de prensa y los derechos humanos publican una declaración conjunta en apoyo de este periodista y defensor del derecho a la información en su país, que corre el riesgo de pasar 14 años en la cárcel.
Las organizaciones defensoras de la libertad de expresión, los derechos humanos y los periodistas abajo firmantes denuncian el acoso judicial que sufren los periodistas turcos y en particular Erol Önderoğlu, representante de la organización para la defensa de la libertad de prensa Reporteros sin Fronteras (RSF) en Turquía. Erol Önderoğlu se expone a una larga pena de cárcel por su trabajo en favor del pluralismo mediático.
Llamado a comparecer por haber participado en la campaña “Directores en alerta” organizada en solidaridad con el diario Özgür Gündem [1] -cerrado en 2016-, Erol Önderoğlu y sus dos compañeros de banquillo -la médico forense y activista de derechos humanos Şebnem Korur Fincancı, y el escritor y periodista Ahmet Nesin-, fueron absueltos tras un juicio que se prolongó durante tres años. Sin embargo, el 3 de noviembre de 2020, la Tercera Sala Penal de la Corte de Apelaciones de Estambul revocó la sentencia absolutoria dictada el 17 de julio de 2019.
Así es como, a partir del 3 de febrero, el Sr. Önderoğlu y sus coacusados serán juzgados de nuevo por «propaganda a favor de una organización terrorista», «incitación pública a cometer delitos» y «apología de delitos y delincuentes». Estos cargos falaces se les imputan por el único motivo de haber acogido a la redacción del citado diario, víctima de la represión mediática que siguió al intento de golpe de Estado de 2016. En conjunto, los tres coacusados pueden ser condenados a hasta 14 años y medio de prisión en virtud de la Ley antiterrorista núm. 3713 del Código penal turco.
El nuevo juicio al que se verá sometido este infatigable defensor de la libertad de expresión ilustra de forma trágica la caza de brujas emprendida por el gobierno del presidente Erdogan contra los medios de comunicación críticos en su país. Turquía es actualmente la mayor cárcel de Europa para los periodistas profesionales y los pocos medios independientes que quedan sufren continuamente acoso y marginación, mientras que a los periodistas detenidos y a las redacciones forzadas a cerrar se les deniega cualquier recurso legal.
Denunciamos la detención y las causas legales de las que son actualmente víctimas los periodistas en Turquía, porque constituyen una tentativa autocrática de silenciar a todas las voces disonantes y de evitar que los periodistas independientes hagan su trabajo.
Garantizamos nuestro apoyo y solidaridad a Erol Önderoğlu y a sus dos coacusados, Şebnem Korur Fincancı y Ahmet Nesin, procesados en Turquía durante cuatro años. Hacemos un llamado al gobierno turco para que retire todos los cargos en su contra y ponga fin a cualquier forma de represión contra periodistas, escritores y académicos.
“El acoso judicial del que Erol es víctima forma parte de la gran represión de la libertad de expresión que azota a Turquía. Simboliza los atropellos a sus derechos que sufren, a nuestro modo de ver, cientos de periodistas y personalidades de la sociedad civil en el país. Le aseguramos nuestro apoyo y nuestra solidaridad, y exigimos que los cargos contra él y sus coacusados, Şebnem Korur Fincancı y Ahmet Nesin, sean retirados de inmediato”, declara la directora del programa para Europa y Asia Central de Artículo 19, Sarah Clarke.
“El hecho de que a Erol lo sigan persiguiendo por un gesto de solidaridad entre colegas es una señal de la penosa situación del Estado de derecho en Turquía. Le expresamos nuestro apoyo y exigimos el fin de este implacable acoso judicial”, dice el responsable de activismo del Centro Europeo para la Libertad de Prensa y los Medios (European Centre for Press and Media Freedom, ECPMF), Laurens Hueting.
“Erol ha realizado una inmensa labor en defensa de la libertad de prensa en Turquía, lo que debe ser apreciado en su justo valor, y no castigado. Las autoridades turcas deberían retirar los cargos en su contra, permitirle trabajar de forma segura en el país y tomar medidas para mejorar el desastroso estado de la libertad de prensa en Turquía”, indica el coordinador de programas para Europa y Asia Central del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), Said Gulnoza.
“Erol siempre ha colaborado sobre el terreno con los sindicatos y organizaciones afiliadas a la Federación Europea de Periodistas (EFJ). Estamos convencidos de que el acoso judicial que sufre es en realidad un acto de intimidación contra todos los periodistas del país. Cuenta con nuestro apoyo”, afirma el secretario general de la EFJ, Ricardo Guttierez.
“Aunque este caso concierne a Erol, sus consecuencias afectarán a cada periodista independiente y a cada ciudadano en Turquía. Si las autoridades logran reducir al silencio a periodistas como Erol, los ciudadanos se verán privados de su derecho a la información y la democracia padecerá por ello. ¡Retiren todos los cargos ahora!”, reclama el secretario general de la Federación Internacional de Periodistas (FIP), Anthony Bellanger.
“La crueldad de haber absuelto Erol Önderoğlu para después volver a juzgarlo por las mismas falacias es inconmensurable. También demuestra que la justicia turca no solo se equivoca, sino que además es vengativa. Tiene que acabarse esa práctica que consiste en silenciar a periodistas comprometidos como Erol Önderoğlu. Tengan la seguridad de que el mundo entero ya es consciente del acoso y la persecución, y de que las autoridades turcas deben prestar atención a estos ataques y ponerles fin”, señala la directora ejecutiva de IFEX, Annie Game.
“La persecución sin escrúpulos de las autoridades turcas contra Erol, Şebnem y Ahmet demuestra lo lejos que están dispuestas a llegar para silenciar a las voces disidentes. Instamos a las autoridades a respetar, de forma integral y sin condiciones, los derechos fundamentales de estos tres defensores de los derechos humanos; ni más ni menos”, afirma Jessica Ní Mhainín, responsable de investigación y activismo de Index on Censorship.
“El continuo hostigamiento contra Erol Önderoğlu y sus coacusados subraya, una vez más, que el sistema turco de justicia ha sido instrumentalizado de forma que sirva al gobierno para reprimir la libertad de expresión y la libertad de prensa. Este caso escandaloso y vergonzoso solo pretende silenciar a quienes se pronuncian en favor de la defensa de los derechos fundamentales en Turquía. El IPI y sus miembros de todo el mundo expresan a Erol su apoyo y su solidaridad ”, señala el subdirector del Instituto Internacional de Prensa (IPI), Scott Griffen.
“Durante años, nuestro colega Erol Önderoğlu ha estado en la primera línea de defensa de la libertad de expresión en Turquía. Ha librado esta lucha con integridad, imparcialidad y objetividad. El hecho de que corra el riesgo de que lo metan en la cárcel por su compromiso con la libertad de prensa es una negación lamentable de los mismos derechos que intentaba proteger”, denuncia la coordinadora del programa para de Europa de PEN International, Sarah Whyatt.
“Erol Önderoğlu debería ser un honor para Turquía. En cambio, se le persigue e incluso se le acosa por razones arbitrarias. Ningún país puede pretender ser una democracia cuando su gobierno y su justicia luchan de esta manera contra los defensores de los derechos humanos”, declara el secretario general de RSF, Christophe Deloire.
[1] Periódico publicado en turco y en kurdo y perseguido por su cobertura crítica, además de por sus estrechos vínculos con círculos kurdos.