El Índice de Impunidad del CPJ en 2013 destaca los países donde los periodistas son asesinados y los responsables quedan libres.
Azotada por militantes en el norte del país y por conflictos políticos en todo el territorio, Nigeria se ha convertido en una de las naciones con los peores registros de violencia letal y sin castigo contra la prensa, según reveló el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) en su recientemente actualizado Índice de Impunidad. El índice global, que calcula asesinatos de periodistas no resueltos en relación con la población de cada país, también halló elevados registros de impunidad en Somalia, Pakistán y Brasil.
«Las investigaciones de estas muertes por lo general se realizan de manera muy torpe, y no se capturan a los verdaderos culpables», afirmó Ayode Longe, alto funcionario de Media Rights Agenda (Agenda para los Derechos de los Medios), una organización de libertad de prensa en Nigeria, donde al menos cinco periodistas cayeron en relación directa con el ejercicio de la profesión desde el 2009. Ninguno de estos casos ha sido resuelto. «Ello ha estimulado a otros a agredir a periodistas, porque creen que nada les va a suceder», resaltó Longe. La prensa nigeriana había experimentado con anterioridad una década de relativa seguridad, pero este año Nigeria se incorporó al índice por primera vez y ocupó el undécimo lugar a escala mundial entre los países con peores registros en combatir la violencia letal contra la prensa.
El CPJ halló mejores condiciones en Nepal, país que abandonó el índice completamente, y en Rusia, nación que ha poseído una de las culturas de impunidad más profundamente arraigada del mundo. Aunque ambas naciones siguen presentando peligros para los periodistas, en ellas se ha observado en general un declive de la violencia letal contra la prensa y varios procesamientos parcialmente exitosos en casos de asesinato de periodistas.
El índice de impunidad anual del CPJ identifica a los países donde los periodistas son asesinados regularmente y los gobiernos fracasan en su intento por resolver los crímenes. El índice de 2013 examinó los casos de periodistas asesinados ocurridos entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de diciembre de 2012 y que aún permanecen sin resolverse. Sólo los países con cinco o más casos sin resolverse son incluidos en el índice. Los casos son considerados no resueltos cuando no se obtuvo condena alguna. Este año 12 países figuran en el índice.
La difusión del índice de 2013 del CPJ llega en un momento crucial para la lucha global contra la impunidad. Un plan de la ONU para combatir la violencia letal contra la prensa se pondrá en marcha este año, y Pakistán fue escogido como uno de los primeros candidatos. Entre las muchas medidas que implementará, el plan se propone fortalecer los programas dedicados a la seguridad de los periodistas y ayudar a los estados miembros a crear métodos para enjuiciar a los asesinos de periodistas.