El nuevo marco legal sofoca más si cabe al clima de opresión a la prensa online. Bajo la nueva legislación, los periódicos online tendrán que solicitar un registro.
Este artículo fue publicado originalmente en rsf.org el 5 de noviembre de 2018.
Reporteros sin Fronteras condena la nueva ley de regulación de medios que entra en vigor en Egipto y que impone unas condiciones financieras intolerables a los últimos medios de comunicación independientes que quedan en el país. El nuevo marco legal sofoca más si cabe al clima de opresión a la prensa online.
Bajo la nueva legislación que las autoridades han empezado a aplicar el 23 de octubre, los periódicos online tendrán que solicitar un registro. Obtener un permiso parece imposible para webs que ya hayan sido bloqueadas por el Gobierno, y de obtenerlo no hay garantía de que no puedan volver a ser bloqueadas.
Los artículos 34 y 36 de la nueva legislación determinan la cantidad que deben depositar en una cuenta bancaria, dependiendo del tipo de medios. Pedir un permiso para un medio cuesta 33.000 euros y es necesario un depósito inicial de 2.450 para iniciar el proceso. Se trata de una cantidad elevada para un país como Egipto, más si cabe para webs independientes.
Según la información recabada por Reporteros sin Fronteras, las web de noticias tienen muy poco tiempo para solicitar estos permisos y, de no hacerlo, se enfrentan a duras multas que van desde los 50.000 a los 150.000 euros. El sitio Marryat ya ha decidido suspender sus actividades mientras estudia acciones legales, para evitar exponerse a una elevada multa.
«Esta ley es casi una extorsión, porque los periodistas van a tener que pagar ahora si quieren trabajar», afirma Sophie Anmuth, responsable de la oficina de Oriente Medio de Reporteros sin Fronteras. «La entrada en vigor de una ley tan coercitiva como ésta tiene un claro objetivo político: silenciar a las voces independientes. Nos enfrentamos ante la probable extinción o exilio de los últimos medios independientes en Egipto», añade.
La nueva legislación de prensa tiene otros artículos destinados a restringir el flujo de noticias e información online. Bajo el artículo 19, cualquier web personal, blog o red social que tenga más de 5.000 seguidores será considerada un medio de comunicación y por ello susceptible de ser vigilada por las autoridades. El Consejo Supremo para la Regulación de los Medios tiene ahora el poder de bloquear o suspender estas cuentas personales si considera que están «publicando o difundiendo noticias falsas».
El periodismo independiente en Egipto está muriendo y los lectores cada vez tienen menos acceso online a él por los cientos de webs que han sido bloqueadas el último año. Con al menos 38 periodistas profesionales y no profesionales encarcelados en la actualidad por causas relacionadas con informar, Egipto ocupa el puesto 161 de los 180 países que ocupan la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros sin Fronteras.