Condenada en 2017 por cargos de "propaganda terrorista", la artista y periodista kurda Zehra Doğan pasó casi tres años en prisión antes de su liberación en febrero de 2019.
Quiero repetir la enseñanza de Picasso: ¿Realmente crees que un pintor es solo alguien que usa su pincel para pintar insectos y flores? Ningún artista le da la espalda a la sociedad; un pintor necesita usar su pincel como arma contra los opresores.
El 21 de julio de 2016, una semana después de que se reprimiera un intento de golpe de estado en Turquía y se hubieran impuesto estrictas normas de emergencia, se detuvo a Zehra Doğan, una artista y periodista de 27 años de edad de JİNHA, una agencia de noticias completamente femenina. La llevaron a un centro de detención local, luego a Nusaybin, una ciudad a unos 60 km. El 29 de julio, fue acusada de ser miembro y hacer propaganda para una «organización ilegal», el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Según JINHA, Doğan supo que había sido identificada como sospechosa por testigos anónimos. Ninguno pudo nombrarla, y un testigo solo pudo identificarla como «una dama de baja estatura con un piercing en la nariz».
Los fiscales agregaron que las publicaciones en las redes sociales y las pinturas de Doğan se encontraban entre las pruebas en su contra. El hecho de que tuviera acceso a las áreas que se dice que están bajo el control del PKK fue otra acusación, y se sugirió que habría necesitado vínculos con la organización para poder moverse libremente. Doğan respondió diciendo que cualquier denuncia se relacionaba enteramente con su trabajo legítimo como periodista.
Como pintora, Doğan representa a menudo a mujeres kurdas en posturas y colores brillantes y exuberantes, pero también pinta imágenes más oscuras de la guerra y el conflicto. Su espíritu creativo y su compromiso con el periodismo la siguieron hasta la prisión, donde formó parte de un grupo de mujeres que crearon una edición escrita e ilustrada – a mano- del periódico Özgür Gündem (Agenda Libre) a la que titularon Özgür Gündem Zindan (Agenda Libre Calabozo).
El Özgür Gündem original fue un periódico producido en Estambul, pero dirigido principalmente a lectores de habla kurda. Se enfrentó al hostigamiento y a cierres persistentes. En mayo de 2016 se lanzó una campaña de solidaridad con el periódico donde periodistas, académicos/as, escritores/as, artistas y otros/as actuaron como «editores/as invitados/as» de un día. Como resultado, 37 editores/as invitados/as fueron arrestados/as y varios/as aún están siendo juzgados/as por cargos de «propaganda terrorista». En agosto de 2016, el periódico fue «cerrado temporalmente» también por «propaganda terrorista». La edición de mujeres prisioneras pudo salir de prisión cuando visitantes tomaron fotos que luego publicaron en las redes sociales.
JİNHA se cerró a la fuerza el 29 de octubre de 2016, y fue uno de los más de 100 medios de comunicación cerrados desde el golpe de estado fallido. Sin embargo, continuó informando a través de Facebook y Twitter. Casi al mismo tiempo, el frágil proceso de paz de Turquía, que se había mantenido más o menos desde 2009, se derrumbó y se reanudaron las hostilidades.
Tras su arresto en julio de 2016, Doğan pasó 4,5 meses en prisión preventiva. Fue liberada para ser juzgada por cargos de «propaganda terrorista» (se retiró el cargo de pertenencia a una organización terrorista). El 27 de marzo de 2017, fue condenada en el Segundo Tribunal Penal de Mardin a 2 años, 9 meses y 22 días de prisión; fue detenida el 12 de junio de 2017.
En la cárcel, Doğan continuó con su arte; aunque se le negara un pincel y pintura, usó comida y bebidas para mezclar colores y seguir pintando. En una carta a un miembro de la familia en octubre de 2017, escribió: «Sigo pintando y escribiendo. La imaginación de una persona se expande cuando se la encarcela. Pinto a las mujeres de aquí y escribo sus historias. Puedes encarcelar a un artista, pero no puedes detener su productividad».
Después de cumplir toda su condena de prisión, Doğan fue liberada en febrero de 2019. Ese mismo año recibió un premio de la Libertad de expresión de Index on Censorship y el premio Coraje excepcional en el periodismo de la Fundación May Chidiac.
Desde su salida de prisión, Doğan ha expuesto su trabajo en Turquía, España, Italia, Alemania y Suiza. Gran parte de su arte luego de salir de prisión trata sobre temas feministas y narra su tiempo tras las rejas. En 2021, recibió el premio Le Soir Prix Atomium por Prisión N°5, una novela gráfica que describe su experiencia tras las rejas.
En octubre de 2023, tras una apelación de Doğan, el Tribunal de Casación anuló la sentencia de 2017 por la que había cumplido su pena de prisión. El caso se volvió a juzgar en mayo de 2024, y ella fue absuelta de todos los cargos.
Ilustración de Florian Nicolle