Mayada Ashraf, una periodista egipcia de 22 años de edad del diario Al-Dustour, fue una de las tres personas que murieron durante las protestas que estallaron tras la decisión de Abdel Fattah El-Sisi de renunciar a los militares y candidatearse a la presidencia.
El 28 de marzo, Mayada Ashraf, una periodista egipcia de 22 años de edad del diario Al-Dustour y el sitio web de noticias Masr Al-Arabiya, murió por disparos cuando cubría los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes en la zona de Ain Shams al este de El Cairo.
Ashraf fue una de las tres personas que murieron durante las protestas que estallaron tras la decisión de Abdel Fattah El-Sisi de renunciar a los militares y candidatearse a la presidencia.
Cinco miembros de IFEX han publicado declaraciones condenando el asesinato de la joven periodista y exigiendo que las autoridades abran una investigación profunda e imparcial.
El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) informó que Ashraf recibió un disparo en la cabeza. En su informe más reciente de los enfrentamientos de ese día ella describió a los Hermanos Musulmanes como un grupo terrorista.
Todavía no se sabe quién le disparó. Los grupos que apoyan al ejército están culpando a la Hermandad Musulmana por su asesinato, mientras que los que apoyan a los Hermanos Musulmanes están señalando al ejército y sus partidarios.
Sherif Mansour, coordinador de programa del CPJ para Oriente Medio y África del Norte, reiteró la necesidad de una investigación independiente sobre el asunto. «La muerte de un periodista no debe ser utilizada para ajustar cuentas políticas – la atención debería centrarse en el derecho de los periodistas a cubrir con seguridad los acontecimientos en Egipto.»
La Red Árabe para la Información de Derechos Humanos (ANHRI) informó que Ashraf se graduó de la Facultad de Comunicación de Masas de la Universidad de El Cairo, y señaló que su proyecto de graduación había ganado el primer lugar. Poco después, ella consiguió un trabajo como periodista de Al-Dustour, y había estado trabajando allí durante casi tres años.
En su declaración de condena, la Organización Egipcia de Derechos Humanos (EOHR) indicó que la protección de los periodistas, sobre todo cuando cubren protestas y enfrentamientos, debe ser garantizada. Se llegó a decir que el Ministerio del Interior podría desempeñar un papel importante mediante la colaboración con el sindicato de periodistas para garantizar un clima seguro para que los periodistas puedan trabajar.
En esa nota, según Reporteros sin Fronteras, Ashraf fue asesinada el mismo día que el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas adoptó una resolución sobre la importancia del papel que desempeñan los periodistas en la cobertura de las manifestaciones y la necesidad de que los Estados les den la protección necesaria.
La Federación Internacional de Periodistas (FIP) incluyó en su declaración un llamamiento para que al colega de Ashraf, que fue testigo de los disparos, se le garantice protección completa durante la investigación.
Las protestas contra la candidatura de Sisi a la presidencia han estado en curso desde el 28 de marzo; las elecciones presidenciales se celebrarán los días 26 y 27 de mayo.