Cuando aquellos que cometen crímenes contra la libertad de expresión no rinden cuentas, nos hace daño a todos. Visite daytoendimpunity.org/es/ todos los días del 1ro al 23 de noviembre y actúa para poner fin a la impunidad.
El 1 de noviembre de 2013, IFEX lanzó la tercera campaña internacional del Día Mundial contra la Impunidad. Y si bien hay una creciente toma de conciencia del problema de la impunidad y la forma en que permite – e incluso exacerba – violaciones de los derechos humanos, se debe mantener la presión. La red IFEX cuenta con más de 80 organizaciones que trabajan en más de 60 países de todo el mundo, e incluye algunas de las personas más valientes que usted jamás haya conocido, trabajando bajo algunas de las condiciones más peligrosas que usted pueda imaginar. Con esta campaña unimos nuestras voces para crear conciencia acerca de cómo una cultura de impunidad sofoca la libertad de expresión, y buscamos inspirar a las personas a actuar para debilitar su poder.
La impunidad es un problema global. Es totalmente generalizada. Se puede encontrar en cualquier parte del mundo y puede tomar muchas formas. Se trate de un caso de un bully escolar o un dictador corrupto, cuando reina la impunidad – cuando la gente en una sociedad se siente libre de actuar sin temor a las consecuencias – algunos utilizan esa libertad para herir a los demás. Para silenciar sus voces. Especialmente las críticas. Las que hacen preguntas difíciles, expresando diferentes opiniones y creencias. Las que documentan los abusos de poder, el crimen, y la corrupción. Las que fotografían los ataques brutales contra manifestantes pacíficos. Las que descubren prácticas industriales destructivas que amenazan a nuestro medio ambiente, incluyendo el agua que bebemos y los alimentos que comemos. Las que exponen a las empresas que tratan a los trabajadores como esclavos y los obligan a trabajar en condiciones inhumanas peligrosas. ¿A quién silencia la impunidad? Silencia a estas personas, y su silencio tiene enormes repercusiones para todos nosotros.
Innumerables ciudadanos, artistas, blogueros, científicos, músicos y periodistas han sido acosados, amenazados, torturados, intimidados, encarcelados y peor aún por el ejercicio de su derecho humano fundamental a la libertad de expresión. Más de 500 periodistas han sido asesinados en la última década. La mayoría de los autores de estos crímenes nunca fueron puestos a disposición judicial. El impacto no es difícil de imaginar. En un país donde una persona es asesinada impunemente por informar sobre la corrupción, ¿qué probabilidad hay de que otro continúe con ese trabajo?
Las campañas buscan cambiar las cosas. Si bien el impacto de las acciones de campaña no siempre es evidente inmediatamente, especialmente cuando el objetivo es un cambio sistémico, en algunos casos el efecto es inmediato y tangible. Es un ejemplo de ello la campaña del año pasado que destacaba a Tuver Wundi, un reportero de televisión y activista ambiental de Goma, República Democrática del Congo. En ese momento había estado escondido desde julio de 2012. Fue cuando los miembros del movimiento rebelde M-23 habían amenazado con matarlo por denunciar públicamente la ocupación del Parque Nacional Virguna. Después de la campaña de 2012, que atrajo la atención mundial sobre su caso, Wundi dijo:
“La campaña generó mucha cobertura de los medios de comunicación y un compromiso público profundo en la RDC. Se puso mucha presión sobre el gobierno para que me proporcione seguridad, y dio coraje a otros periodistas para continuar con su trabajo.”
La campaña de este año incluye convocatorias para actuar en apoyo de cinco valientes individuos: Yorm Bopha, activista camboyana de derechos humanos amenazada en repetidas ocasiones, golpeada y actualmente en prisión por protestar pacíficamente contra el acaparamiento de tierras; Eren Keskin, defensora de los derechos en Turquía amenazada y atacada con disparos mientras buscaba justicia para las mujeres que han sido violadas y torturadas; Doaa Eladl, una caricaturista egipcia amenazada por la creación de historietas que se consideraron blasfemas; Martin Pallares, periodista ecuatoriano amenazado por informar sobre corrupción en el gobierno, y Rommy Mom, un abogado de Nigeria luchando por la transparencia y responsabilidad del gobierno, que ha tenido que huir de su casa después de las amenazas de muerte y una denuncia pública realizada por radio por el gobernador del Estado. Sumándose en esta iniciativa las organizaciones miembro de IFEX en todo el mundo pondrán en marcha sus propias iniciativas, sumando sus voces al llamado para poner fin a la impunidad.
El centro de la campaña es daytoendimpunity.org/es/. Cada día, entre el 1ro y 23 de noviembre – Día Mundial contra la Impunidad – se destacará algo nuevo. Hemos creado recursos multimedia para ayudar a la gente a entender el problema y encontrar maneras de agregar su voz a una red global de activistas que trabajan juntos. A través de infografías, vídeos, experiencias interactivas en línea, artículos, perfiles de países y entrevistas, esperamos involucrar al mayor número de personas en esta campaña que ataca a la raíz misma de la injusticia y la inseguridad que silencia la expresión.
El derecho a la libertad de expresión asusta a mucha gente. No sólo es un importante derecho en sí mismo, sino que es un derecho que permite que las violaciones de los demás derechos sean expuestas. Visite daytoendimpunity.org/es/ todos los días del 1ro al 23 de noviembre y actúa para poner fin a la impunidad.