El mes de mayo de 2021 en Europa y Asia Central: Un resumen de noticias sobre la libertad de expresión producido por el editor regional de IFEX, Cathal Sheerin, basado en los informes de los miembros de IFEX y las noticias de la región.
Esta es una traducción del artículo original.
Bielorrusia dominó nuevamente las noticias durante el mes de mayo con redadas de alto perfil en los medios de comunicación, detenciones masivas de periodistas y el secuestro estatal absolutamente indignante de un avión comercial. El mes también fue testigo de mayores restricciones a los periodistas que informan sobre actividades policiales por parte de las autoridades turcas. En Rusia, vimos nuevos intentos para ahogar el espacio cívico, pero también algo de justicia, aunque parcial, en el caso del el periodista Ivan Golunov.
“Secuestro criminal”
Incluso nosotros que estamos acostumbrados a leer sobre las violaciones masivas de los derechos humanos que ocurren en Bielorrusia nos sentimos conmocionados por los acontecimientos de este mes.
El 23 de mayo, Raman Pratasevich, fundador y editor del canal independiente de Telegram NEXTA y su novia, Sofia Sapega, fueron arrestados después de que las autoridades bielorrusas obligaran a su vuelo de Ryanair de Atenas a Vilnius a desviarse y hacer un aterrizaje de emergencia en Minsk. El gobierno bielorruso dijo que había forzado el cambio de ruta debido a una amenaza de bomba enviada por correo electrónico. Sin embargo, los informes de noticias revelaron que la amenaza citada en realidad se envió después de que el avión había sido desviado.
Pratasevich había sido un objetivo durante algún tiempo. Las autoridades bielorrusas habían intentado previamente extraditarlo de Polonia debido a su trabajo en NEXTA, calificado de «extremista» por un tribunal de Minsk en 2020. NEXTA es extremadamente popular y ha estado compartiendo noticias e información sobre las protestas contra Lukashenko que se han estado produciendo desde las controvertidas elecciones presidenciales de agosto de 2020.
Al día siguiente de la detención de Pratasevich, este apareció en un video en el que declaraba que lo trataban bien, que estaba cooperando con las autoridades y que era responsable de «organizar disturbios masivos» (por los que podría enfrentar hasta 15 años de prisión). El video tenía todas las características de una confesión forzada: el rostro de Pratasevich mostraba hematomas.
Sapega también apareció en un video «confesando» haber revelado información sobre funcionarios de seguridad bielorrusos a través del canal de Telegram «Libro Negro de Bielorrusia». Según la Asociación de Periodistas de Bielorrusia (BAJ), ha sido acusada de «incitación al odio o la discordia racial, étnica, religiosa o de otro tipo social» y enfrenta hasta 12 años de prisión.
El desvío forzoso del vuelo (descrito como un «secuestro» por el presidente de la Comisión de la UE) y la detención de Pratasevich y Sapega provocaron la indignación internacional. Los jefes de Estado, ministros de Relaciones Exteriores, eurodiputados y ONGs se apresuraron a exigir la liberación de Pratasevich y pidieron que se tomaran más medidas contra el régimen de Lukashenko.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, pidió una investigación y se comprometió a imponer más sanciones al régimen de Lukashenko. El presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos, Robert Menéndez, emitió una declaración conjunta con sus homólogos de la República Checa, Letonia, Alemania, Lituania, Irlanda, Polonia y el Reino Unido, pidiendo también sanciones y la prohibición de los vuelos sobre Bielorrusia. El Consejo Europeo acordó una extensión de las sanciones económicas específicas y la prohibición de que las aerolíneas bielorrusas entren en el espacio aéreo de la UE. Los parlamentarios del Reino Unido pidieron al gobierno del Reino Unido que bloquee el acceso del régimen de Lukashenko a la financiación a través de la Bolsa de Valores de Londres. La Fiscalía General de Lituania acordó investigar a Lukashenko por «secuestro criminal», tras una denuncia presentada por Reporteros sin Fronteras. Los miembros de la Coalición por la Libertad de los Medios (IFEX es miembro de la Red Asesora de la Coalición por la Libertad de los Medios) exigieron la liberación de Pratasevich y de todos los periodistas encarcelados en Bielorrusia.
[Traducción: Los líderes de la #EUCO actuaron enérgicamente en respuesta a las escandalosas acciones del régimen de Bielorrusia. Cerramos nuestro espacio aéreo a los aviones de Bielorrusia y pedimos a las aerolíneas de la UE que no sobrevuelen el país. Próximamente se presentarán más sanciones económicas.]
Los miembros de IFEX también alzaron sus voces en protesta. ARTICULO 19, la Asociación de Periodistas de Bielorrusia (BAJ), el Comité para la Protección de Periodistas, la Federación Europea de Periodistas, Free Press Unlimited, Human Rights Watch, Index on Censorship, PEN America, PEN Internacional y Reporteros sin Fronteras emitieron declaraciones en las que pedían la liberación inmediata de Pratasevich, Sapega y todos los presos políticos y periodistas de Bielorrusia.
[Traducción: Tuve una reunión hoy en Vilnius (#Lituania) en la oficina del Fiscal General con el Fiscal a cargo del terrorismo. Expresó su satisfacción por la denuncia de @RSF_inter y dijo que se incorporó a la investigación penal.
Decenas de metros detrás de nosotros está #Bielorrusia, cuyo gobierno encarcela a una generación de sus periodistas y amplifica la represión. Protestamos en la frontera para expresar nuestra solidaridad con #RamanPratasevich y al menos otros 20 reporteros encarcelados arbitrariamente #PressFreedom @RSF_inter ]
A los pocos días del cambio de ruta forzoso del vuelo de Pratasevich, las aerolíneas habían comenzado a evitar el espacio aéreo bielorruso. Las organizaciones culturales internacionales también actuaron en relación a sus preocupaciones sobre los abusos de los derechos humanos de Lukashenko: la Unión Europea de Radiodifusión suspendió al miembro bielorruso BRTC, citando la transmisión de «entrevistas aparentemente obtenidas bajo coacción»; la Unión Ciclista Europea canceló el Campeonato de Europa de Pista de Élite 2021 programado para realizarse en Minsk en junio.
Aunque el arresto de Pratasevich y Sapega haya dominado los titulares, el suceso no fue sino uno de los muchos hechos inquietantes y de los actos de represión que tuvieron lugar en mayo. Entre otros, encontramos:
- La muerte repentina en prisión del activista de la oposición Vitold Ashurak, que cumplía una condena de cinco años por participar en protestas contra Lukashenko. Según las autoridades de la prisión, Ashurak murió de un infarto. Sin embargo, su familia respondió que no tenía antecedentes de problemas cardíacos y un certificado de defunción preliminar decía que la causa de la muerte aún no se había determinado. El destacado activista de derechos humanos Ales Bialiatski (ex preso político) destaca en este artículo las muchas preguntas sin respuesta sobre la muerte de Ashurak.
- La redada en el estudio de Minsk de la emisora independiente Belsat TV el 21 de mayo. Los agentes de seguridad detuvieron a seis miembros del personal, cada uno de los cuales fue posteriormente condenado a quince días de detención.
- La redada en oficinas y domicilios de periodistas del portal de noticias independiente TUT.BY el 18 de mayo como parte de una investigación fiscal. Al menos 12 miembros del personal fueron detenidos y el sitio web de la organización fue bloqueado. Yuliya Charnyauskaya, la viuda del fundador de TUT.BY, está bajo arresto domiciliario y su abogado tiene prohibido revelar los cargos que enfrenta.
- Una «confesión» muy cuestionable de un miembro detenido de PEN Bielorrusia, Aliaksandr Fiaduta. Fiaduta fue detenido por la KGB en abril acusado de estar involucrado en un complot para asesinar a Lukashenko. Según los informes, confesó ser parte de una «conspiración» en un comunicado enviado este mes al periódico Narodnaya Volya y dijo que no había sido torturado.
- La condena de siete activistas de la sociedad civil, incluidos seis miembros de la campaña europea de Bielorrusia, a entre cuatro y siete años de prisión por su activismo de oposición.
- El bloqueo de acceso al sitio web de apoyo legal en derechos humanos Probono.by.
[Traducción: Familiares #bielorrusos del preso político Vitold Ashurak recibieron su cuerpo. El amigo de la familia, Volha Bykouskaya, dice que tenía la cabeza completamente envuelta, solo se veía la boca. Les dijeron que el cuerpo de Vitold se cayó accidentalmente cuando se sacó del refrigerador.]
También en mayo, Lukashenko promulgó enmiendas a la ley destinadas a reprimir las protestas y la libertad de los medios de comunicación: ahora todas las manifestaciones deberán ser autorizadas oficialmente. La cobertura mediática de protestas, actividades de oposición y temas sociopolíticos será muy restringida, como explica BAJ.
Lukashenko también firmó un decreto que permite la transferencia de poderes presidenciales al Consejo de Seguridad de Bielorrusia (compuesto por simpatizantes del presidente, incluido su hijo) en caso de ser asesinado o si no puede cumplir con sus funciones.
La preocupación internacional por la situación de los derechos en Bielorrusia ha continuado desde las elecciones presidenciales del verano pasado, cuando Lukashenko inició la actual represión de las voces independientes. El 21 de mayo, 37 Estados de la OSCE reiteraron su llamado a Bielorrusia para que implemente las recomendaciones del informe del Mecanismo de Moscú, investigue los informes de violaciones y abusos de los derechos humanos y entable un diálogo para abordar la crisis actual. A principios de mes, la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de Estados Unidos celebró una audiencia sobre la situación de los derechos humanos en Bielorrusia. Entre los testigos se encontraban la líder de la oposición bielorrusa, Sviatlana Tsikhanouskaya, y Gulnoza Said, del Comité para la Protección de los Periodistas. La organización Freedom House también presentó una declaración. Puede ver un video de la audiencia en el sitio web de la Comisión.
Según la organización bielorrusa de derechos humanos Viasna, actualmente hay 451 presos políticos en Bielorrusia. A finales de mes, BAJ informó que había 34 periodistas y trabajadores de los medios tras las rejas.
Consulte la cronología bielorrusa de IFEX, que con su actualización periódica reúne todos nuestros resúmenes mensuales de las actividades de los miembros de IFEX y otros desarrollos clave en Bielorrusia.
Desalentando el periodismo en Turquía
Turquía mantiene su récord como uno de los países que más encarcela periodistas del mundo, según mostró un informe publicado por Expression Interrupted. Según el informe en los primeros cuatro meses del 2021, 213 periodistas fueron enjuiciados y 20 condenados a un total de 57 años y 10 meses de prisión. A finales de abril al menos 68 periodistas estaban en prisión (y es la primera vez que la cifra cae por debajo de los 70 desde 2016).
El trabajo de los periodistas turcos se tornó más riesgoso a finales de abril cuando la Dirección General de Seguridad emitió una circular prohibiendo la grabación audiovisual de los agentes del orden en las protestas. Expression Interrupted (un proyecto de la Plataforma de Periodistas Independientes (P24)) proporciona un análisis legal de la circular, argumentando que su resultado pretendido es “ocultar las imágenes y filmaciones que documentan el uso desproporcionado de la fuerza por parte de la policía”. Expression Interrupted también informa que la circular se puso en vigor de inmediato, lo que provocó que la policía confiscara los teléfonos de los periodistas y les impidiera filmar en un mitin del Primero de Mayo.
La importancia de registrar las actividades de la policía en las protestas quedó ilustrada este mes por las conclusiones de un informe de la Fundación de Derechos Humanos de Turquía (TİHV). Según el informe, entre 2015 y 2019, más de 20000 personas fueron detenidas en manifestaciones; cerca de 5000 fueron procesadas por ejercer su derecho a la libertad de reunión y 4450 sufrieron violencia por parte de policías, que también dispararon contra 90 de ellas.
[Traducción: El Sindicato de Periodistas de Turquía (TGS) ha apelado contra la circular de la Dirección General de Seguridad que prohíbe las grabaciones de audio y video de los agentes de policía durante las protestas https://bit.ly/3eVYjRR]
El espacio cívico en Rusia se sofoca
En Rusia, los legisladores presentaron tres proyectos de ley que se sumarían a la creciente lista de restricciones legislativas sobre la sociedad civil. Dos de los proyectos de ley ampliarían el impacto de la ley rusa sobre las organizaciones «indeseables». El tercero permitiría a las autoridades prohibir a cualquier persona postularse para un cargo político si está asociada con grupos considerados «extremistas». Los objetivos sabidos de este proyecto de ley incluyen a los colegas del líder opositor encarcelado Alexei Navalny, cuyo estatus de «preso de conciencia» fue restaurado por Amnistía Internacional este mes. Adicionalmente, las autoridades están intentando calificar su fundación anticorrupción como «extremista».
Aunque el espacio cívico está bajo una presión cada vez mayor, una “nueva ola de activismo feminista se está extendiendo por Rusia”, según un artículo inspirador de openDemocracy publicado este mes. Utilizando entrevistas con cuatro feministas de diferentes regiones, el artículo analiza los desafíos que enfrentan las activistas por los derechos de las mujeres en un país donde “el feminismo sigue siendo una provocación”; donde brindar asesoramiento a personas LGBTQI+ podría convertirte en blanco de ataque bajo la notoria ley de “propaganda gay”; y en un país en que establecerse como una ONG podría hacer que te tilden de «agente extranjero». Para tener una idea del activismo local, échale un vistazo al artículo.
Hubo buenas noticias a fines de mes, no obstante, cuando un tribunal de Moscú dictó penas de prisión de entre cinco y 12 años a cinco ex policías, luego de ser condenados por fabricar un caso contra el periodista de Meduza Ivan Golunov en 2019. Aunque sean buenas (y raras) las noticias cuando se castiga a los culpables, Meduza dice que no se habrá hecho justicia hasta que no se sancione al autor intelectual del accionar de los policías.