A 24 horas de su secuestro, la mañana del 26 de mayo de 2009 fue encontrado el cadáver del periodista Eliseo Barrón Hernández, del periódico "La Opinión" de Grupo Milenio-Multimedios Laguna, en una bolsa de plástico con señales de tortura, en el municipio de Tlahualilo, Durango.
(CENCOS/IFEX) – A 24 horas de su secuestro, la mañana del 26 de mayo de 2009 fue encontrado el cadáver del periodista Eliseo Barrón Hernández, del periódico «La Opinión» de Grupo Milenio-Multimedios Laguna, en una bolsa de plástico con señales de tortura, en el municipio de Tlahualilo, Durango, colindante con el estado de Coahuila (noreste). Al momento de su muerte, el periodista documentaba el caso de los 302 policías que fueron despedidos en el municipio de Torreón, Coahuila, debido a que no aprobaron los exámenes de confianza.
Barrón Hernández, reportero especializado en la cobertura de información policíaca en el periódico «La Opinión», fue secuestrado en su domicilio ubicado en la colonia Parque Hundido del municipio de Gómez Palacio, Durango, a las 20:05 horas (hora local) del 25 de mayo por un comando de ocho sujetos vestidos de negro, los cuales tenían el rostro cubierto con pasamontañas. De acuerdo a fuentes consultadas por CENCOS, que por razones de seguridad prefieren permanecer en el anonimato, su secuestro fue perpetrado con lujo de violencia y en presencia de su esposa e hijas menores de edad, para luego ser obligado a abordar un auto marca Tsuru Nissan que tomo rumbo desconocido.
El reportero de Milenio, recientemente documentaba el caso de los 302 policías quienes fueron despedidos por no aprobar los exámenes de confianza y también difundió información acerca de las denuncias de 8 de ellos como secuestradores. En su última nota con fecha 25 de mayo, Barrón Hernández documentó el caso de un policía quien trabajaba como escolta del actual Director de Seguridad Pública Municipal, Karlo Castillo García y que también fue despedido tras disparar su arma de fuego.
Familiares del periodista asesinado interpusieron de inmediato una denuncia ante las autoridades de la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR). Barrón Hernández tenía más de 10 años como reportero y su principal tema de investigación fue el policíaco.
CENCOS hace un llamado a las autoridades del Gobierno Federal y Estatal y de manera particular a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Durango a fin de esclarecer el móvil del asesinato y aplicar la ley para castigar a los responsables de los hechos y que éstos no queden en la impunidad.
Asimismo, recuerda a las autoridades Federales y a las autoridades del Gobierno del Estado de Durango que, según la Declaración de Principios de Libertad de Expresión aprobada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la libertad de expresión es un principio básico e indispensable para la existencia de una sociedad democrática y es el Estado quien tiene el deber de prevenir e investigar este tipo de hechos para sancionar a los autores asegurando la reparación del daño.
CENCOS expresa su solidaridad con colegas, amigos y colaboradores del periodista Barrón Hernández.