El 1 de enero de 2014, unos hombres armados le dispararon al periodista paquistaní Shan Dahar. Luego, fue llevado a un hospital local donde permaneció sin vigilancia hasta que sucumbió por sus heridas. Más de dos años después, ninguno de los autores ha sido llevado ante la justicia.
Zakir Ali – también conocido como Shan Dahar – era Jefe de la Oficina del canal de televisión Abb Takk en el distrito de Larkana de la provincia de Sind, Pakistán. Shan recibió un disparo en la espalda a las 12:30 del 1 de enero de 2014 y fue llevado al hospital Chandka Medical College Hospital (CMCH), donde permaneció sin vigilancia hasta que sucumbió por sus heridas en la mañana, nueve horas después.
La policía local, en una investigación que su familia considera deficiente e interesada, declaró que la muerte había sido un accidente producto de disparos de celebración en la víspera de Año Nuevo. Sin embargo, la familia cree que fue atacado debido a sus reportajes sobre la venta ilícita de medicamentos donados por ONG en los hospitales locales. La comunidad de medios en Pakistán cree también que la muerte fue un castigo por su labor periodística. Shan estaba trabajando en una serie de reportajes provocadores y había recibido amenazas antes de los disparos.
En las nueve horas que pasó en el CMCH, Shan logró informar telefónicamente a sus amigos y familia que Amir Zehri e Irfan Zehri eran los individuos que le habían disparado. Sin embargo, ninguno de los dos está siendo investigado por el delito de asesinato; en vez, se enfrentan a un juicio en ausencia tras fugarse del juicio.
El miembro de IFEX Fundación de Prensa de Pakistán (PPF) logró, junto a la familia de Shan Dahar, que el caso fuera re-investigado como un asesinato intencional, basado en la evidencia que refuta la afirmación de una muerte accidental y apunta a un posible encubrimiento por autoridades locales. PPF está trabajando actualmente con la familia y otras partes interesadas para garantizar que la nueva investigación conduzca a la identificación y el enjuiciamiento de los responsables de la muerte de Shan. La impunidad en Pakistán es desenfrenada, como lo demuestran las conclusiones de la PPF: de los 72 casos de asesinatos de profesionales de los medios desde 2002, únicamente se han dictado condenas en tres casos.
Actores clave
Lo que están haciendo los miembros de IFEX
La Fundación de Prensa de Pakistán está trabajando con la familia de Shan Dahar, así como con otras partes interesadas locales e internacionales para que el caso sea nuevamente investigado. PPF busca promover unos medios de comunicación libres e independientes en Pakistán y de manera rutinaria documenta y condena violaciones contra la prensa.
Bytes 4 All Pakistan ha ofrecido su apoyo como parte de su mandato de defender la libertad de expresión en el sur de Asia. Bytes 4 all de Pakistán se centra en el uso de las Tecnologías de Información y Comunicación para fortalecer el desarrollo y los derechos humanos en Pakistán y más allá.
El Comité para la protección de los periodistas (CPJ) se ha unido a la familia de Shan Dahar en la defensa de su caso. En el 2014, el CPJ envió una delegación para reunirse con el primer ministro, Nawaz Sharif, para asegurar compromisos para combatir las amenazas que enfrentan los periodistas en Pakistán. La muerte de Shan Dahar se puso de relieve en el Índice de Impunidad 2015.
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