La condena del pistolero responsable del asesinato del periodista radial colombiano Luis Antonio Peralta Cuéllar y su esposa, Sofía Quintero, hecho ocurrido en 2015, es un satisfactorio avance hacia la justicia, declaró el CPJ.
Este artículo fue publicado originalmente en cpj.org el 2 de febrero de 2018.
La condena del pistolero responsable del asesinato del periodista radial colombiano Luis Antonio Peralta Cuéllar y su esposa, Sofía Quintero, hecho ocurrido en 2015, es un satisfactorio avance hacia la justicia, declaró hoy el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). Un tribunal de Florencia, capital del suroccidental departamento de Caquetá, ayer sentenció a Yean Arlex Buenaventura a cumplir una pena de privación de libertad de 58 años y tres meses por el asesinato de Peralta y Quintero, quienes fueron ultimados a balazos el 14 de febrero de 2015, cerca de la entrada de su vivienda, en la ciudad de Doncello, según informaciones de prensa.
Peralta, de 63 años, había trabajado como periodista por más de tres décadas antes de ser asesinado. Era propietario y director de la radioemisora Linda Stéreo, donde transmitía reportajes investigativos críticos sobre cuestiones locales, entre ellas la industria petrolera, las licitaciones de contratos estatales y presuntos actos de corrupción en el Gobierno local, de acuerdo con versiones noticiosas. En su fallo, el juez halló que se había demostrado que Peralta había sido asesinado en represalia por su trabajo periodístico, particularmente los reportajes críticos transmitidos en su programa radial, según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), con sede en Bogotá.
«Esta sentencia es una importante señal en el sentido de que los asesinos de periodistas colombianos ya no podrán evadir la justicia», declaró Robert Mahoney, subdirector ejecutivo del CPJ. «Instamos a las autoridades a seguir activamente la investigación, identificar a los autores intelectuales y a todos los responsables de este crimen, y lograr justicia para Luis Antonio Peralta y Sofía Quintero».
Se trata de la segunda significativa pena de cárcel dictada por el asesinato de un periodista colombiano en los últimos seis meses y la más larga condena jamás impuesta por un delito contra la libertad de expresión en Colombia, según la FLIP. En septiembre de 2017, Juan Camilo Ortiz fue sentenciado a cumplir una pena de 47 años y 6 meses de cárcel por el asesinato de la periodista radial Flor Alba Núñez Vargas, hecho ocurrido en 2015. Aunque el historial de Colombia en materia de impunidad ha mejorado desde 2015, los periodistas colombianos frecuentemente sufren amenazas y actos de violencia, de acuerdo con datos del CPJ.