Casi dos años después de la llegada del primer grupo de periodistas a España, los cuatro que permanecen en el país viven en condiciones difíciles, luchando incluso para alimentarse.
(CPJ/IFEX) – el 17 de abril de 2012 – Lo que sigue es parte del blog del CPJ:
Por Maria Salazar-Ferro/Coordinadora de la Campana de Impunidad y del Programa de Asistencia
En 2010, tras negociaciones de mitad de verano entre la Iglesia Católica y el gobierno del Presidente Raúl Castro, las autoridades cubanas comenzaron a liberar periodistas presos, enviándolos a un exilio forzado con sus familias. En abril de 2011, el último de más de 20 periodistas llegó a España. Les habían concedido libertad y respiro, y se les había prometido apoyo de las autoridades españolas mientras se adaptaban al nuevo país. Pero casi dos años después de la llegada del primer grupo de periodistas a España, los cuatro que permanecen en el país viven en condiciones difíciles, luchando incluso para alimentarse.
Mijaíl Bárzaga Lugo, Julio César Gálvez Rodríguez, Ricardo González Alfonso y Omar Rodríguez Saludes figuraban entre los 29 periodistas y editores arrestados por Cuba durante una masiva embestida contra la disidencia y la prensa independiente en la isla. Bárzaga Lugo, un periodista independiente de la Agencia Noticiosa Cubana, recibió una pena de 15 años de cárcel; Gálvez Rodríguez, un veterano periodista, fue sentenciado también a 15 años de prisión; Ricardo González Alfonso, periodista independiente, poeta y corresponsal de Reporteros Sin Fronteras, fue condenado a 20 años, mientras que el fotógrafo Rodríguez Saludes recibió la enorme pena de 27 años de cárcel. Las condiciones inhumanas en las que vivieron tras las rejas incluyeron comida en mal estado, falta de atención médica e inodoros que desbordaban, sólo por nombrar algunas. En sus casas, sus familias eran constantemente acosadas por autoridades y vecinos al estar vinculados con la disidencia cubana.