Un camarógrafo del canal Globovisión y su asistente fueron detenidos cuando captaban la imagen de un mural en una pared perimetral de una brigada de infantería del ejército.
(IPYS/IFEX) – El 5 de agosto de 2009, el camarógrafo Robmar Narváez y su asistente, Jesús Hernández, del canal Globovisión, fueron detenidos cuando captaban la imagen de un mural cuyos dibujos de varios próceres regionales habían amanecido con pintas rojas y símbolos de mordaza. El mural se encuentra en una de las paredes perimetrales de la 13a. Brigada de Infantería del Ejército en la ciudad de Barquisimeto, en el estado de Lara. Los periodistas fueron detenidos por orden del general Gerardo Izquierdo, comandante de dicha brigada militar.
Narváez dijo al IPYS que hacía tomas del mural cuando el general Izquierdo lo abordó para exigir que le muestre su credencial de periodista. Como Narváez no la tenía a la mano, le mostró su cédula de identidad. El general ordenó a tres oficiales que retuvieran al periodista y lo llevaran a la sede militar. Junto a Hernández, fue sometido a un interrogatorio por agentes de inteligencia. También les tomaron fotos, escanearon sus cédulas de identidad y revisaron las imágenes captadas.
Doricer Alvarado, periodista de Globovisión, denunció que camarógrafos de Televen y Venezolana de Televisión, y el equipo de prensa de la gobernación del estado Lara también grabaron el mural pero no fueron detenidos ni interrogados.
Izquierdo desmintió que los periodistas hayan sido detenidos, sino que fueron «invitados» a la base militar para saber quiénes eran.
La Ley de Seguridad y Defensa de Venezuela no contempla ninguna disposición que prohíba tomar registro gráfico de las fachadas de las instalaciones militares.
Narváez y Hernández permanecieron más de tres horas en la sede militar. Fueron sometidos a un chequeo forense, para dejar constancia de que no fueron maltratados.