La agresión policiaca contra el equipo periodístico ocurrió cuando realizaba una cobertura sobre un caso de secuestro.
(IPYS/IFEX) – El 26 de noviembre de 2009, Shirley Flores y Karen Paola Rueda, productoras periodísticas de la red televisiva PAT, fueron interceptadas por un grupo policial de élite, arrastradas de los cabellos, golpeadas y encerradas en una celda durante tres horas, mientras que Ismael Montes, conductor del vehículo que las transportaba, fue herido en la pierna derecha con un disparo. El hecho ocurrió en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.
PAT emitió un comunicado en el que denunció el abuso policial que sufrió su equipo periodístico cuando realizaba una cobertura frente al domicilio de una familia que denunció el secuestro de uno de sus integrantes.
Según la denuncia, los periodistas aguardaban en el lugar cuando fueron atacadas por los policías, que no portaban identificación. El equipo periodistico intentó escapar en su auto pero fue perseguido por un motorizado – sin distintivos policiales – desde donde se efectuaron disparos.
El vehículo de PAT se detuvo por un percance en una rueda. Entonces, los efectivos irrumpieron con violencia, redujeron a golpes y tomaron de los cabellos a las mujeres, mientras que el chofer recibió un balazo. Flores y Rueda permanecieron en celdas separadas y fueron liberadas tres horas más tarde de lo ocurrido. Montes fue internado en un hospital.
El directorio de PAT demandó públicamente sanciones contra el grupo policial denominado Delta. Las periodistas presentaron una demanda por tentativa de homicidio y abuso de autoridad ante la Fiscalía. El comandante nacional de la Policía, Víctor Hugo Escobar, atribuyó el hecho a una confusión y anunció el inicio de una investigación.
El 30 de noviembre, la policía de Bolivia anunció en La Paz que ha identificado y enviado a proceso interno a dos policías acusados de ser los autores de la agresión y detención del equipo periodístico de PAT.
René Sanabria, presidente del Tribunal Disciplinario de la Policía, informó que los dos integrantes del grupo policial Delta, cuyos nombres y grado no especificó, incurrieron en atentado contra la vida y admitió que podrían ser sometidos también a la justicia ordinaria.
IPYS y la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) condenan el atentado contra el equipo periodístico de PAT y exigen sanciones drásticas para los responsables.
Por otra parte, el 30 de noviembre, la periodista Paola Mallea, también de la red televisiva PAT, denunció que fue secuestrada por dos sujetos que se metieron en su automóvil cuando iba por una avenida de Santa Cruz de la Sierra. Dos días antes, Maella fue atacada con un cuchillo luego que el agresor la identificara como periodista de ese medio.
Mallea presentó una denuncia judicial detallando que fue maniatada y encerrada en un cuarto durante nueve horas. Sus captores, dijo, la abandonaron en las afueras de la ciudad. Según el examen forense, no hubo lesiones físicas graves. La policía informó que el caso está siendo investigado.
IPYS y la ANP permanecen atentos a los resultados de las investigaciones.