"Lo que consideramos inicialmente como una medida temporal, el cierre de RCTV, se ha convertido en la norma del gobierno: eliminar las voces que disienten," dijo la SIP.
(SIP/IFEX) – Miami, 27 de mayo de 2010 – La SIP apostó hoy por la reapertura de Radio Caracas Televisión (RCTV) de Venezuela, en el tercer aniversario de su cierre, como «muestra de voluntad política» de parte del gobierno del presidente Hugo Chávez, en especial por tratarse de una época de contienda electoral, en la que el público necesita acceder a información plural y diversa dentro del necesario juego de las ideas que implica el sistema democrático.
El presidente de la SIP, Alejandro Aguirre, subdirector del Diario Las Américas, de Miami, dijo que «lo que consideramos inicialmente como una medida temporal, el cierre de RCTV, se ha convertido en la norma del gobierno: eliminar las voces que disienten». Sin embargo, agregó que «siempre tenemos la esperanza que en una muestra de voluntad política democrática y respeto a la libertad de prensa, el gobierno de Hugo Chávez restituya la señal abierta de RCTV».
El 27 de mayo de 2007 el gobierno venezolano se apoderó de los transmisores de RCTV y canceló su señal abierta. Desde entonces, se viene acelerando un proceso de censura y eliminación de medios de comunicación críticos, así como la apertura de medios oficiales que responden a lineamientos y líneas editoriales pro gubernamentales y de propaganda.
Entre otras acciones y medidas de presión, 34 radioemisoras han dejado de operar en Venezuela, se utiliza el sabotaje económico contra medios críticos al gobierno y, entre otras restricciones se han abierto 40 procesos judiciales y administrativos en contra del canal Globovisión, cuyo presidente, el periodista Guillermo Zuloaga, tiene prohibido salir del país debido a un proceso judicial por el delito de vilipendio contra el jefe de Estado.
La SIP también ha venido reiterando el pedido de que el gobierno autorice la visita de una delegación internacional de la Organización de los Estados Americanos y de su Comisión Interamericana de Derechos Humanos para verificar el estado de las libertades de expresión y de prensa en Venezuela.