El colaborador de los medios de comunicación fue puesto en libertad condicional después de comparecer ante los jueces por "irregularidades" y "agresión".
(RSF/IFEX) – Darsi Ferrer, disidente y colaborador de los medios de comunicación y el director del Centro de Salud y Derechos Humanos «Juan Bruno Zayas», fue puesto en libertad condicional el 22 de junio de 2010, después de comparecer ante los jueces por «irregularidades» y «agresión». Este médico de formación molesta a las autoridades con su trabajo de información sobre el estado actual del sistema de salud cubano y la situación de los presos políticos.
Detenido, según la versión oficial, por intentar conseguir «ilegalmente» material destinado a reformar su casa insalubre, Ferrer estaba encarcelado sin juicio desde el 21 de julio de 2009, en la cárcel de Valle Grande, al oeste de La Habana. Aunque el ministerio público pidió una condena de tres años de prisión, finalmente la pena de Ferrer fue de un año y tres meses de cárcel. Al cumplir casi la totalidad de su condena, pasará los últimos meses en residencia vigilada.
«Es evidente que esta liberación nos tranquiliza a pesar de que Darsi Ferrer fuese condenado al final a una pena de cárcel que corresponde al tiempo que pasó detrás de las rejas. Nadie se engaña sobre los motivos reales de esta detención, en un país donde las autoridades no toleran la expresión pública de las opiniones disidentes. En ningún caso se trata de una medida de clemencia. Se trata aún menos de una señal de mejora de la situación de las libertades fundamentales y de los derechos humanos en Cuba,» dijo Reporteros sin Fronteras (RSF).
El país sigue contando con 24 periodistas encarcelados – entre los que figura el corresponsal de RSF Ricardo González Alfonso, detenido desde la «Primavera Negra» de marzo de 2003 – entre unos 200 presos políticos. El acoso, la represión y las campañas odiosas de las autoridades y de los que las apoyan siguen siendo moneda corriente para los opositores. De hecho, la pequeña agencia Hablemos Press informó del arresto, el 21 de junio de 2010, de dos periodistas de la Agencia de Prensa Libre Avileña (APLA), José Manuel Caraballo Bravo y Raúl Arias Márquez.
«Pedimos una vez más que la comunidad de los países de América Latina interceda a favor de los periodistas y disidentes cubanos encarcelados, entre los que algunos sufren enfermedades graves desde su encarcelación,» dijo RSF.