Calixto Ramón Martínez Arias recientemente informó a través de Hablemos Press, los problemas de la distribución de agua en La Habana.
(RSF/IFEX) – 15 de mayo de 2012 – Calixto Ramón Martínez Arias, arrestado el 10 de mayo de 2012 y desde entonces retenido en un centro de detención de la Policía Nacional Revolucionaria en La Habana, está a punto de ser trasladado a la fuerza por décima vez en dos años hacia Camagüey, su ciudad natal. Su deportación debería llevarse a cabo en tres días.
Corresponsal de la agencia de noticias independiente Hablemos Press, el periodista se encuentra sin ingerir alimentos, como lo informó su hermana, Niurka Caridad Ortega, quien lo visitó el pasado 14 de mayo. Según Hablemos Press, que cita directamente sus palabras, la hermana sostuvo que pudo «verlo y entregarle ropa limpia. Pero me comentó que desde el jueves se encontraba sin ingerir alimentos y estaba escupiendo sangre. Parece que se ha lastimado una ulcera estomacal que padece».
«Calixto Ramón Martínez vive y trabaja en La Habana, donde también se encuentra su familia. Por esta razón, su deportación a Camagüey contrarresta con el voto en 2011 para reducir la severidad de la ley sobre la «migración interna», que limitaba los flujos de personas de las provincias hacia la capital. La libertad de circulación de los individuos es un derecho fundamental que el gobierno cubano debe reconocer, y más aún si algún día decide ratificar los dos pactos de las Naciones Unidas sobre los Derechos Civiles y Políticos que firmó en el 2008 «, declaró Reporteros sin Fronteras.
«¿Por qué las autoridades persisten en a querer arrancar a un hombre de su entorno cotidiano? ¿Porque recientemente informó a través de Hablemos
Press, los problemas de la distribución de agua en La Habana? Este tema merece todo, menos represalias tan absurdas como estas contra el periodista que levantó la controversia. Esta décima expulsión sería ridícula si no traicionara una vez más, el rechazo de un régimen – que se dice sin embargo ser consciente de tener que evolucionar en su práctica del poder – de establecer un diálogo abierto y permanente con la sociedad civil», concluyó la organización, que reclama igualmente los cuidados adecuados para el periodista.
Hablemos Press ha contabilizado algo más de 1.900 detenciones o actos de hostilidad de las autoridades hacia la disidencia desde el comienzo de 2012, de las cuales 340 se presentaron en el mes de abril. La agencia se encuentra directamente afectada por esta represión. Además de Calixto Ramón Martínez, sus periodistas Gerardo Younel Avila y Magali Norvis Otero fueron víctimas de una breve detención, el pasado 6 y 9 de mayo respectivamente.