Jorge Armando Santiago Martínez, ex jefe de la policía municipal de Santiago de Jamiltepec, fue condenado a 30 años de cárcel por disparar en múltiples ocasiones contra Marcos Hernández Bautista el 21 de enero de 2016.
Este artículo fue publicado originalmente en cpj.org el 6 de marzo de 2017.
Un tribunal de justicia en el estado mexicano de Oaxaca condenó a Jorge Armando Santiago Martínez por el asesinato de Marcos Hernández Bautista, periodista del diario Noticias, Voz e Imagen de Oaxaca. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) saludó la decisión del 3 de marzo e instó a las autoridades a procesar a todos los involucrados en el crimen.
Durante la audiencia en Puerto Escondido, Santiago Martínez, ex jefe de la policía municipal de Santiago de Jamiltepec, fue condenado a 30 años de cárcel por disparar en múltiples ocasiones contra Hernández fuera de un bar que era propiedad del periodista, hecho ocurrido el 21 de enero de 2016, según un comunicado de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca. A Santiago Martínez le ordenaron pagar 178,000 pesos mexicanos (9,100 dólares estadounidenses) en concepto de reparación para la familia del periodista, según el comunicado.
«Aplaudimos a las autoridades mexicanas por esta condena en el asesinato del periodista Marco Hernández Bautista», afirmó Carlos Lauría, coordinador sénior del programa de las Américas del CPJ. «Si bien este es un primer paso alentador para abordar la cuestión de la violencia contra la prensa, no habrá justicia plena hasta tanto el autor intelectual haya sido aprehendido. Exhortamos a las autoridades mexicanas a identificar y a procesar en la justicia al autor intelectual del crimen y a quebrar el ciclo de violencia letal contra los medios».
Las autoridades arrestaron a Santiago Martínez el 25 de febrero de 2016 y lo acusaron del asesinato el 25 de julio del mismo año, según informes de prensa. El comunicado de la Fiscalía General de Oaxaca no incluyó información sobre el motivo del crimen. La fiscalía no respondió de inmediato a una llamada del CPJ.
Hernández, quien también era corresponsal de la radio La Ke Buena en el municipio de Pinotepa Nacional, informaba sobre temas sociales y había escrito sobre protestas en torno a la construcción de una represa hidroeléctrica, según informes de prensa. La editora en Noticias, Voz e Imagen, María de los Ángeles Velasco, informó al CPJ que el periodista también había denunciado a funcionarios por robo de tierras y corrupción.
Velasco indicó que Hernández fue asesinado unos días después de que una noticia falsa fuera publicada en Facebook. La noticia falsa sobre un supuesto robo de tierras fue efectuada como si fuera un artículo de Noticias. Hernández, quien no tuvo ninguna participación en el artículo, comenzó a recibir llamadas amenazantes, según Velasco y colegas del periodista, quienes hablaron con el CPJ bajo condición de anonimato por temor a represalias.
Hernández también era regidor de cultura en Santiago Jamiltepec y militante de un partido político izquierdista de la oposición, llamado MORENA, según Ismael Sanmartín Hernández, director editorial de Noticias, Voz e Imagen de Oaxaca.
El CPJ ha documentado al menos 37 casos de periodistas caídos por su labor en México desde 1992, incluyendo 34 asesinatos en directa represalia por su labor. Antes de la sentencia del 3 de marzo, en 88 por ciento de los casos de asesinato, existe total impunidad. En otro 9 por ciento de los casos, al menos un individuo fue condenado pero no todos los involucrados en el crimen han sido enjuiciados. El CPJ está investigando al menos otros 49 casos de periodistas que fueron asesinados en circunstancias poco claras para determinar si tienen relación con su labor informativa.