Miles de migrantes que integran una caravana que partió de San Pedro Sula, Honduras, con destino a Estados Unidos el 13 de octubre de 2018, se encuentran actualmente en el sur de México. A medida que la caravana atraviesa México, aumenta el riesgo para los periodistas que la acompañan.
Este artículo fue publicado originalmente en cpj.org el 26 de octubre de 2018.
Miles de migrantes que integran una caravana que partió de San Pedro Sula, Honduras, con destino a Estados Unidos el 13 de octubre de 2018, se encuentran actualmente en el sur de México. A medida que la caravana atraviesa México, aumenta el riesgo para los periodistas que la acompañan.
Según la historia de anteriores caravanas, las cifras de participantes pueden mermar y las personas pueden coger distintas rutas para llegar a Estados Unidos. Sin embargo, los migrantes pueden ser vulnerables a los delincuentes y los carteles –quienes secuestran, extorsionan y obligan a grupos vulnerables a participar en actividades ilegales y en la prostitución–, así como a los funcionarios migratorios y las fuerzas de seguridad. Es probable que traficantes de personas conocidos como «coyotes» estén cerca de la caravana. Los migrantes corren un riesgo elevado de violencia física y agresiones sexuales. Los periodistas que los acompañan, particularmente los de la prensa local, también están expuestos en potencia.
Evaluación del riesgo
Los periodistas que tengan previsto seguir una ruta migratoria deben informarse sobre los grupos que controlan la ruta y, en consecuencia, realizar evaluaciones de riesgo.
La red criminal de Los Zetas es una de las más activas en cuanto a abordar a los migrantes y representa una amenaza significativa para cualquiera que realice labores periodísticas en las zonas controladas por esta red. El control que los carteles ejercen sobre una zona puede ser muy transitorio y las zonas disputadas por distintos grupos son particularmente proclives a la violencia. Como indicador general de las zonas de dominio de cada cartel, los periodistas deben consultar este mapa de la BBC o InsightCrime, que ofrece actualizaciones sobre el crimen organizado en México y Latinoamérica.
Los periodistas también pueden ser afectados por la policía y las autoridades migratorias que participan en el plan de la frontera sur de México para restringir la migración. Las autoridades han establecido numerosos controles a lo largo de las principales rutas y es probable que detengan a los periodistas y les soliciten identificación. Los migrantes son vulnerables a la corrupción de las fuerzas de seguridad locales, según informaciones de prensa. Los periodistas también pueden correr riesgos a manos de funcionarios corruptos.
Como mínimo un periodista ha sufrido lesiones durante los enfrentamientos entre los migrantes y las autoridades. Según un mensaje de Twitter, la periodista mexicana María de Jesús Peters resultó lesionada este 19 de octubre, durante un enfrentamiento entre migrantes y la Policía Federal mexicana en un puente ubicado en la frontera entre Guatemala y México.
Los periodistas deben estar conscientes del potencial de enfrentamientos entre migrantes y las autoridades fronterizas en la frontera de Estados Unidos. Los periodistas deben sopesar los pros y los contras de usar equipo de protección personal, que puede ocupar mucho espacio para transportar. Los periodistas que no utilicen equipo de protección personal que estén informando sobre desórdenes civiles deben valorar cuidadosamente su posición. Para más información sobre la cobertura informativa de protestas, consulte las guías del CPJ.
Las autoridades mexicanas han intentado impedir que los migrantes suban a bordo de un tren de carga conocido como La Bestia. La policía mexicana ha cumplido estrictamente la prohibición contra subirse a los trenes, y se ha reforzado la presencia policial cerca de las estaciones de trenes o en las zonas donde los trenes suelen frenar la velocidad, según informaciones de prensa. Todo periodista que intente montar un tren debe estar consciente de que es una actividad muy riesgosa que puede acabar con lesiones o inclusive la muerte. Montar el tren por períodos largos aumenta el riesgo de ser presa de delincuentes que abordan a los migrantes. En los últimos años, ha habido descarrilamientos de trenes de carga en zonas donde son comunes los deslizamientos de lodo, lo cual ha arrojado un saldo de varios heridos y muertes.
Retos logísticos y ambientales que se deben tomar en cuenta
En las zonas rurales de México los cajeros automáticos son escasos, y los periodistas deben asegurarse de contar con un suministro adecuado de dinero en efectivo en pequeñas denominaciones.
Las actuales condiciones climáticas en el sur de México son calurosas, con una cantidad considerable de lluvia. Dependiendo de la ruta, el terreno puede variar significativamente entre selva y desierto. Es esencial tener la vestimenta correcta y el calzado adecuado para caminar. Los periodistas que visiten tales zonas deben estar precavidos ante los deslizamientos de tierra y demás desastres naturales provocados por las lluvias y la erosión.
Los periodistas que viajen con los migrantes deben cerciorarse de tener las vacunas correctas y un botiquín de primeros auxilios. Se debe tener tabletas de purificación del agua o una fuente de suministro de agua potable y los periodistas deben llevar consigo medicamentos antidiarreicos y repelente de mosquitos.
Para consultar información adicional sobre cómo incluir información médica en su evaluación de riesgo, le rogamos visitar el capítulo Atención médica y vacunas de la Guía de seguridad del periodista del CPJ.
El transporte y el alojamiento
Los estándares de conducción son bajos y los accidentes de tránsito son comunes en el sur de México. Conducir de noche es más peligroso. Es difícil encontrar taxis o choferes y los vehículos tienen poco mantenimiento y a menudo los asientos no tienen cinturones. Siempre que sea posible, los periodistas deben coordinar por adelantado la contratación de vehículos. Muchos migrantes saltan encima de camiones, lo cual aumenta el riesgo de lesiones.
Los periodistas deben reservar por adelantado el alojamiento, pues la capacidad hotelera es limitada. Siempre que sea posible, deben buscar cadenas hoteleras que gocen de buena reputación, en lugar de pequeños establecimientos particulares que pudieran ser blanco de la delincuencia.
Los periodistas que viajen en un auto particular deben estar conscientes de que puede demorarse mucho en llegar el servicio de asistencia en carretera en las zonas rurales de México. Las ambulancias también tardan mucho más en llegar al lugar de un accidente.
Seguridad digital
La cobertura telefónica puede ser irregular en ciertas zonas. Los periodistas deben valorar tener un enrutador de Wi-Fi portátil.
Varios periodistas estadounidenses que cubren la caravana han denunciado que han recibido acoso por Internet por su cobertura informativa, particularmente por Twitter o correo electrónico. Se puede consultar información sobre la seguridad digital en el capítulo de Seguridad tecnológica de la Guía de seguridad del periodista del CPJ, y en una lista de recursos sobre seguridad digital en nuestro Centro de Recursos.
Los periodistas que necesiten ayuda, pueden comunicarse con el CPJ escribiendo a report_violation@cpj.org.
La Guía de seguridad del periodista del CPJ posee información adicional sobre la preparación básica y la evaluación del riesgo y la respuesta ante él. El centro de recursos del CPJ cuenta con información adicional y herramientas para la preparación previa a la cobertura y la asistencia posterior a un incidente.