El periodista Armando Murrieta García, director del programa «Tercer Tiempo», que se emite por Radio Diez FM en la ciudad de Iquitos (Loreto), denuncio a Gilberto Fachín Rodríguez de haberlo secuestrado en un ambiente de la pollería Mangos Chickens (propiedad del mismo señor Fachín). Murrieta había afirmado en su programa radial, que Fachín no es […]
El periodista Armando Murrieta García, director del programa «Tercer
Tiempo», que se emite por Radio Diez FM en la ciudad de Iquitos (Loreto), denuncio a Gilberto Fachín Rodríguez de haberlo secuestrado en un ambiente de la pollería Mangos Chickens (propiedad del mismo señor Fachín). Murrieta había afirmado en su programa radial, que
Fachín no es el propietario de dicho local, sino el ex ministro de la Presidencia José Tomás Gonzales Reátegui.
Según lo relatado por el periodista el hecho ocurrio el 22 de enero 2000, cuando concurrio con su esposa a cenar a la mencionada pollería; al ir al baño fue interceptado por Fachín, quien lo condujo
a un ambiente en donde le recrimino las opiniones vertidas en su programa. Allí lo amenazo con un cuchillo y lo golpeo cuando cayo al suelo. La esposa, al ver que demoraba en exceso, fue a buscarlo. Momentos después, el periodista aparecio ensangrentado y con la ceja rota. El hecho fue denunciado ante la comisaría del lugar. El 25 de enero, fue presentado ante la Fiscalía de prevencion del delito.
No sería la primera vez que Fachín habría actuado de esta forma. De acuerdo con lo manifestado por el periodista Luis Ugaz, aproximadamente en junio de 1999 Fachín lo amenazo y lo agredio
verbalmente. Ugaz, en ese entonces director del noticiero «Yo soy la voz del Pueblo» de Radio Diez, dijo que fue amenazado también por haber criticado al exministro Gonzales Reátegui. Fachín, quien trabajaba en ese entonces en la Comision Transitoria de Administracion Regional (CTAR) Loreto, fue al centro de labores del periodista. Con revolver en mano y usando palabras groseras, le advirtio que dejase de hablar de Gonzales Reátegui. Además le informo que era «cinturon negro». En esa ocasion, Ugaz hizo publica las amenazas.
