(RSF/IFEX) – El 6 de diciembre de 2003, Adolfo Fernández Saínz fue agredido, en su celda, por otro preso. Golpeado en el rostro, el periodista perdió el conocimiento. Continúa empeorando la situación de los periodistas y disidentes cubanos encarcelados que, junto con sus familias, eligieron el Día Internacional de los Derechos Humanos, el 10 de […]
(RSF/IFEX) – El 6 de diciembre de 2003, Adolfo Fernández Saínz fue agredido, en su celda, por otro preso. Golpeado en el rostro, el periodista perdió el conocimiento.
Continúa empeorando la situación de los periodistas y disidentes cubanos encarcelados que, junto con sus familias, eligieron el Día Internacional de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre, para alertar a la opinión pública.
RSF denuncia las condiciones de detención de periodistas y presos de conciencia, y hace a las autoridades responsables de cualquier agresión que puedan sufrir. La organización acusa al gobierno de haber trasladado a los detenidos políticos a celdas colectivas con presos comunes, para aumentar la presión sobre sus familiares y sobre los periodistas que todavía gozan de libertad en la isla.
«Los traslados efectuados recientemente por las autoridades penitenciarias no han tenido el efecto de mejorar las condiciones de detención de periodistas y presos de conciencia, ya muy debilitados por varios meses de régimen de máxima severidad y grandes privaciones», ha manifestado Robert Ménard, secretario general de RSF. «Desde que han estado encerrados en celdas colectivas con presos comunes, se ven expuestos a todo tipo de violaciones por parte de otros detenidos, y siguen sufriendo privaciones. La agresión contra Adolfo Fernández Saínz es exactamente lo que esperaban provocar las autoridades», ha añadido.
El 6 de diciembre, Fernández Saínz intervino en favor de un preso, al que quería pegar otro detenido. El periodista persistió a pesar de las amenazas que le dirigió el agresor. El agresor golpeó a Fernández Saínz en el rostro y el periodista perdió el conocimiento después. Se despertó en la enfermería, con un grave hematoma en el ojo. Al detenido responsable de la agresión nadie le ha molestado. Según su familia, que teme por su vida, el periodista ha manifestado que, a pesar de todo, no piensa dejar de protestar por las injusticias que presencie.
Por otra parte, los periodistas y disidentes cubanos encarcelados anunciaron que iban a ayunar con ocasión del Día de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre. Querían así pedir la liberación de los presos políticos y la democratización del régimen cubano. Entre los periodistas que iban a ayunar, se encontraban José Ubaldo Izquierdo Hernández y Normando Hernández González, detenidos en la cárcel Kilo 5 1/2, en Pinar del Río, junto con otros seis presos políticos, y Víctor Rolando Arroyo Carmona, Jorge Olivera Castillo y Omar Moisés Ruiz Hernández, detenidos en la cárcel provincial de Guantánamo, con otros cinco presos políticos.
Las familias de los presos declararon que también iban a ayunar, en solidaridad con sus familiares encarcelados. Otros periodistas y bibliotecarios independientes, militantes de los derechos humanos y miembros de movimientos o partidos políticos tenían previsto unirse a las familias y participar en el ayuno, los rezos y las diferentes actividades organizadas en los domicilios de algunos de ellos, en La Habana o en otras ciudades del país. Por otra parte, en el Caribe y en Italia estaba previsto celebrar manifestaciones organizadas por la oposición en el exilio, para sensibilizar a la opinión pública sobre la situación de los detenidos políticos en la isla.