(RSF/IFEX) – RSF condena firmemente los ataques sufridos por las emisoras Radio Solidarité y Pyramide, dos radios progubernamentales. «Resulta particularmente preocupante que la prensa, que tradicionalmente es blanco de los partidarios del gobierno, ahora se vea atacada también por algunos miembros de la oposición. Aunque esos actos violentos son bastante menos numerosos que los atribuidos […]
(RSF/IFEX) – RSF condena firmemente los ataques sufridos por las emisoras Radio Solidarité y Pyramide, dos radios progubernamentales.
«Resulta particularmente preocupante que la prensa, que tradicionalmente es blanco de los partidarios del gobierno, ahora se vea atacada también por algunos miembros de la oposición. Aunque esos actos violentos son bastante menos numerosos que los atribuidos a las personas cercanas al poder, no por ello son menos condenables. El uso de la violencia contra los medios de comunicación, cualesquiera que sean los autores, es injustificable e inaceptable», ha declarado Robert Ménard, secretario general de RSF.
«Pedimos a los responsables de la oposición y de la sociedad civil que den consignas a sus partidarios, para que ningún periodista o medio considerado progubernamental sea víctima de violencia o actos de intimidación», ha añadido la organización que pide a las autoridades la apertura de una investigación sobre estas agresiones, y sobre el conjunto de los ataques contra algunos medios de comunicación privados, atribuidos a los partidarios del presidente Jean-Bertrand Aristide.
El 17 de diciembre de 2003, unos manifestantes que reclamaban la renuncia del presidente Aristide atacaron un equipo de Radio Solidarité, a quien reprochan su línea editorial progubernamental. Golpearon a Alexis Eddy Jackson, que figura entre las personas agredidas, y destruyeron su grabadora. Los manifestantes también lanzaron piedras sobre el vehículo perteneciente a la emisora.
El 11 de diciembre, algunas personas cercanas a la oposición que desfilaban cerca de la radio ya habían amenazado con destruirla. Según Venel Remarais, director de Radio Solidarité, después de las nuevas amenazas recibidas en la emisora, la dirección suspendió la programación durante seis horas en la jornada del 13 de diciembre.
Por otra parte, el 11 de noviembre, unos opositores al presidente Aristide saquearon los locales de la radio privada Pyramide, situada en Saint-Marc (al norte de Puerto Príncipe). Marc Antoine Aldorphe, director de la radio Tête a tête, una emisora rival de Saint-Marc, figuraría entre los agresores.
Su competidora consideraría a Pyramide sospechosa de haberla denunciado ante el Consejo Nacional de las Telecomunicaciones (organismo público encargado de gestionar la concesión y el uso de las frecuencias de radio). En efecto, la agresión se produjo pocas horas después de que las autoridades judiciales de la ciudad se incautaran del emisor y dos micrófonos de Tête a tête y sellaran el local de la emisora. Acusan a la radio de funcionar sin permiso legal. En sus programas, Marc Antoine Aldorphe, director de la radio, atacaba a las personas cercanas al poder. También criticó en el aire a Pyramide, a la que acusaba de haberse alineado con el gobierno.
En un comunicado publicado el 18 de diciembre, RSF denunció las violencias y actos de intimidación dirigidos contra una quincena de periodistas, que trabajan para ocho medios de comunicación críticos del gobierno. El comunicado denunciaba igualmente los llamamientos a la violencia proferidos por algunos diputados de Fanmi Lavalas (en el poder) contra los miembros de la oposición y la prensa.