(RSF/IFEX) – RSF expresa su enorme preocupación por la muerte del periodista español Ricardo Ortega. «Enviamos nuestras condolencias a la familia del periodista y renovamos nuestro llamamiento a las partes en el conflicto, para que no hacen de la prensa un blanco», ha explicado Robert Ménard, secretario general de RSF. «Desgraciadamente, la seguridad de los […]
(RSF/IFEX) – RSF expresa su enorme preocupación por la muerte del periodista español Ricardo Ortega. «Enviamos nuestras condolencias a la familia del periodista y renovamos nuestro llamamiento a las partes en el conflicto, para que no hacen de la prensa un blanco», ha explicado Robert Ménard, secretario general de RSF.
«Desgraciadamente, la seguridad de los periodistas en Haití no estará garantizada mientras que sigan actuando en el país milicias armadas, que escapan del control de cualquier poder central reconocido», ha añadido RSF. La organización se ha pronunciado a favor de que, en el menor plazo posible, se abra una investigación sobre el origen de los disparos que han costado la vida al periodista español y herido a su colega estadounidense Michael Laughlin, a fin de que los autores sean identificados y castigados.
El 7 de marzo de 2004, Ortega, enviado especial en Haití del canal español Antena 3, resultó mortalmente herido por disparos que le impactaron mientras que cubría una manifestación de opositores al ex presidente Jean-Bertrand Aristide. Según Enrique Ibáñez, corresponsal en Puerto Príncipe de la agencia española EFE, en el momento en que la manifestación se dispersaba, estalló un tiroteo. En total, el tiroteo causó al menos seis muertos y una treintena de heridos. Según algunos testigos, los disparos procederían de partidarios del ex Presidente. Los manifestantes reclamaban acciones judiciales contra los funcionarios del antiguo régimen.
Laughlin, fotógrafo del diario «Sun Sentinel», publicado en Florida (Estados Unidos), también resultó herido. Tras ser alcanzado por las balas, se refugió inmediatamente, junto con Ortega, en una casa. Según el fotógrafo estadounidense, Ortega, a pesar de estar herido, continuó grabando imágenes.
Los dos hombres fueron posteriormente trasladados al hospital privado de Canapé Vert, en Puerto Príncipe. El periodista español, impactado por dos balas en el tórax y el abdomen, falleció a consecuencia de las heridas. Laughlin, herido en un hombro y en la cara, ha sobrevivido y debería ser trasladado a un hospital de Florida, según Kevin Courtney, portavoz del periódico, citado por la agencia británica Reuters.
Según la agencia norteamericana Associated Press (AP), las fuerzas de paz internacionales no pudieron confirmar el origen de los disparos. Estas habían acompañado a los manifestantes hasta su llegada a la plaza del Campo de Marzo, frente al Palacio Nacional (palacio presidencial). Allí, según la Agencia France-Presse (AFP), su presencia «se demostró inoperante para impedir la irrupción de disparos cuando se disolvía la manifestación». No se produjo ninguna detención, según AP.
Ortega, de 37 años, comenzó su carrera de periodista como corresponsal de la Agencia EFE en Moscú. Posteriormente trabajó para el canal Antena 3, como colaborador y después a tiempo completo, a partir de 1994. Cubrió la guerra en Chechenia, los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, donde entonces era corresponsal, y después las guerras de Afganistán e Irak. Aunque se encontraba de permiso, se puso a disposición de su canal para cubrir la crisis haitiana. Su cuerpo, velado en la Embajada de España en Puerto Príncipe, debería ser repatriado a España el 8 de marzo. En las últimas semanas, varios periodistas extranjeros han sido atacados por partidarios del ex presidente Aristide.
El 20 de febrero, un fotógrafo de la AFP habría resultado herido mientras cubría una manifestación pacifista de estudiantes en Puerto Príncipe. Según AP, también resultaron heridos Roberto Andrade, del canal mexicano Televisa, y otros dos periodistas que trabajan para la red mexicana TV Azteca (ver las alertas de IFEX del 24 de febrero de 2004). Fueron blanco de pedradas y tuvieron que huir. Alcanzados por los militantes, que les persiguieron, se vieron obligados a entregarles sus casetes.
El 24 de febrero, Michel Jean y Sylvain Ricard, periodista y camarógrafo del canal de televisión Radio Canada, fueron blanco de disparos de los chimères pro-Aristide, en el norte de Puerto Príncipe (ver la alerta del 3 de marzo de 2004).
Anteriormente, la violencia había estado dirigida únicamente contra los periodistas haitianos críticos del poder. A dos de ellos, Jean Dominique (ver las alertas del 2 de septiembre, 4 de abril, 26 y 19 de marzo de 2003 y otras) y Brignol Lindor (ver las alertas del 2 de septiembre de 2003, 5 de diciembre, 25 y 16 de septiembre, 2 de abril y 15 de enero de 2002 y otras), los mataron en abril de 2000 y diciembre de 2001, respectivamente. En los años recientes, los chiméres han amenazado y agredido a decenas de periodistas. Desde 2000, una treintena de periodistas han tenido que ir al exilio.