(FLIP/IFEX) – Dos agentes del departamento de Policía de Pereira, ciudad ubicada al occidente del país, les exigieron a un periodista del periódico «El Diario del Otún» que borra las imágenes que habían sido tomadas de un desalojo de un vendedor ambulante. Los hechos se presentaron el 31 de octubre de 2006, hacia las 4:30 […]
(FLIP/IFEX) – Dos agentes del departamento de Policía de Pereira, ciudad ubicada al occidente del país, les exigieron a un periodista del periódico «El Diario del Otún» que borra las imágenes que habían sido tomadas de un desalojo de un vendedor ambulante.
Los hechos se presentaron el 31 de octubre de 2006, hacia las 4:30 de la tarde (hora local), cuando dos agentes que hacían parte de los operativos de recuperación del espacio público entraron a las instalaciones del periódico solicitando la presencia del fotógrafo que había tomado las fotografías. Al parecer, algunos transeúntes que evidenciaron el desalojo y que tomaron fotografías con sus celulares, fueron obligados a borrarlas.
Según lo informó a la FLIP Marta Lucía Manosalva, jefe de redacción de «El Diario del Otún», los uniformados ingresaron armados a las instalaciones del periódico con la intención de borrar las imágenes que se habían tomado. El medio de comunicación está ubicado frente al lugar donde se presentó el desalojo del vendedor ambulante. Las airadas protestas de los periodistas disuadieron a los agentes de su exigencia.
En diálogo con la FLIP, el Comandante de la Policía de Pereira, Teniente Coronel José Antonio Poveda Montes, manifestó que la irrupción de los uniformados fue un hecho aislado, pues los agentes al parecer no sabían que se trataba de las instalaciones del periódico, ni que la persona que había tomado las fotos era un miembro de éste.
Por otro lado, Poveda Montes señaló que los agentes de policía usualmente andan armados. Así mismo, manifestó que las personas a las cuales les fueron borradas las fotografías de los celulares deberían interponer la denuncia ante la Procuraduría General de la Nación, por tratarse de una conducta incorrecta de la Fuerza Publica.
La FLIP condena la irrupción arbitraria de la Policía a «El Diario del Otún» y la exigencia injustificada de exigirle al fotógrafo que borrara el material del operativo policial. Salvo las excepciones establecidas por la ley, los ciudadanos tienen el derecho constitucional de acceder a la información. Este derecho incluye el acceso a lugares públicos donde se desarrollan hechos de interés general.