(FLIP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de la FLIP, con fecha del 15 de diciembre de 2006: Veinte años después, el asesinato de Guillermo Cano continúa en la impunidad El próximo 17 de diciembre de 2006 se cumplen 20 años de la desaparición del director del diario «El Espectador», Guillermo Cano […]
(FLIP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de la FLIP, con fecha del 15 de diciembre de 2006:
Veinte años después, el asesinato de Guillermo Cano continúa en la impunidad
El próximo 17 de diciembre de 2006 se cumplen 20 años de la desaparición del director del diario «El Espectador», Guillermo Cano Isaza, asesinado en Bogotá por carteles del narcotráfico.
Cano Isaza nació en Medellín en 1925 y ejerció el periodismo por más de cuatro décadas. Desde los 17 años se vinculó al entonces diario bogotano (hoy semanario) como cronista. Más adelante, fue director del medio, posición que ocupó hasta el día de su muerte. Fue un referente obligatorio del periodismo colombiano y un acérrimo crítico de los principales problemas del país, como la corrupción, el narcotráfico y la violación de los derechos humanos. En concordancia con esta actitud, fue un asiduo defensor de la libertad de prensa.
Estas características lo hicieron merecedor de varios galardones nacionales e internacionales, entre ellos el Premio Nacional de Periodismo «Simón Bolívar» por su columna dominical ‘Libreta de apuntes’. De la mano de Guillermo Cano, «El Espectador» denunció sin descanso a los narcotraficantes de los carteles de Medellín y Cali, apoyando abiertamente su extradición a los Estados Unidos.
Esta actitud frente a los grandes capos de la droga le costó la vida. El 17 de diciembre de 1986, a 7 de la noche, luego de salir de las instalaciones del periódico, dos sicarios a bordo de una motocicleta se acercaron a su camioneta, lo acribillaron y huyeron.
Su asesinato fue el inicio de una arremetida que el cartel de Medellín, encabezado por Pablo Escobar Gaviria, emprendió contra «El Espectador» por considerarlo su enemigo. Como resultado fueron asesinados otros periodistas y algunos funcionarios administrativos del periódico; unos más debieron exiliarse fuera del país después de recibir amenazas. Adicionalmente, el dos de septiembre de 1989 la sede central de ‘El Espectador’ en Bogotá fue destruida parcialmente con un carro-bomba, al igual que una sede de distribución en otro sector de la capital.
Una investigación saboteada
La investigación del asesinato de Guillermo Cano se adelantó en medio de innumerables presiones e irregularidades. Las autoridades señalaron como presuntos autores intelectuales a los narcotraficantes Pablo Escobar, Gonzalo Rodríguez Gacha y Evaristo Porras (los dos primeros fueron posteriormente dados de baja por las autoridades). El equipo de abogados de Escobar impidió que el caso se trasladara al sistema de justicia ‘sin rostro’. Así, los investigadores y jueces fueron identificados para sobornarlos, intimidarlos o asesinarlos.
Álvaro García Saldarriaga, uno de los autores materiales, fue asesinado por los mismos miembros del cartel de Medellín. Los demás implicados fueron María Ofelia Saldarriaga, Pablo Enrique Zamora, Carlos Martínez Hernández y Luis Carlos Molina Yepes. Un año después del atentado, se declaró inocentes a los tres primeros y culpable a Molina Yepes, quien después de varias rebajas de penas pagó una condena de seis años.
En homenaje, La Fundación Guillermo Cano Isaza realizará una serie de actos de conmemoración sobre la vida y obra del destacado periodista, que comenzarán el próximo lunes 18 de diciembre de 2006 con una misa de aniversario de su muerte. A este evento se suman otras actividades, entre las cuales se encuentran la celebración del ‘Premio Mundial de Libertad de Prensa Guillermo Cano 2007’, que preside la Unesco; la presentación de un informe sobre el ejercicio del periodismo en los últimos 20 años y la instauración de la cátedra Guillermo Cano, con el apoyo de varias facultades de comunicación social de universidades de Antioquia. Marisol Cano Busquets, directora de la fundación y sobrina del periodista, dijo a la FLIP que estas actividades buscan «reafirmar el tipo de periodismo que ejerció Guillermo
Cano: independiente, libre y con ideas claras, para mostrarlo a las nuevas generaciones de periodistas».
La FLIP se une a la conmemoración del vigésimo aniversario de la desaparición de Guillermo Cano Isaza y acompaña a sus familiares y amigos en esta fecha.
La influencia de Guillermo Cano en el periodismo colombiano sigue vigente, y su anhelo de un periodismo libre en Colombia alimenta el esfuerzo de organizaciones como la FLIP.