(IPYS/IFEX) – El 7 de marzo de 2008, el periodista Raúl Sánchez del diario «Perú 21» fue retenido durante una media hora por el teniente de la policía Manuel Ríos Alvarado en la entrada de las instalaciones de la Base Militar de la Diroes, en Lima, donde se sigue el juicio al ex presidente Alberto […]
(IPYS/IFEX) – El 7 de marzo de 2008, el periodista Raúl Sánchez del diario «Perú 21» fue retenido durante una media hora por el teniente de la policía Manuel Ríos Alvarado en la entrada de las instalaciones de la Base Militar de la Diroes, en Lima, donde se sigue el juicio al ex presidente Alberto Fujimori.
El periodista, que acababa de salir de la base, intentaba registrar con la cámara de su teléfono celular el momento en el que el efectivo de la policía discutía de forma prepotente con César Romero, redactor del diario «La República», por reclamar que se le permitiera a un grupo de partidarios fujimoristas no hacer cola para recoger sus documentos.
Al percatarse que Sánchez lo fotografiaba, el policía se abalanzó contra el periodista y rompió el celular. Luego, lo cogió del hombro y lo introdujo en una caseta de seguridad ubicada en la puerta de la Diroes. Lo insultó y le informó que se encontraba detenido.
Sánchez pidió ayuda a un grupo de abogados, con el fin de sentar una denuncia por la ilegal detención.
El periodista fue liberado luego de que llegara el coronel Alfonso Chávarry Estrada, quien llevó a Sánchez hasta su oficina para pedirle disculpas e informarle que el celular sería repuesto.
IPYS rechaza la actitud del teniente Ríos Alvarado y reclama se le imponga la sanción respectiva por abuso de autoridad y agresión contra un periodista.
En un caso distinto, el 5 de marzo, Henry Bautista Alvarado, periodista del programa «Sin Pelos en la Lengua» que se emite por la emisora de radio Las Vegas FM, fue insultado y golpeado por el alcalde Simón Balbuena Marroquín, durante una rueda de prensa informal. El hecho ocurrió en el aeropuerto de Arequipa, región al sur del país.
El periodista preguntó de forma insistente al alcalde sobre el pedido de revocatoria en su contra presentado por un grupo de ciudadanos. El alcalde perdió la paciencia, cogió al periodista de la camisa, lo llevó hasta un rincón apartado y, con insultos, le dijo que no respondería. Luego le dio una cachetada en el rostro.
Tras el incidente, Balbuena Marroquín negó la agresión aunque varios periodistas que fueron testigos de lo ocurrido desmintieron al alcalde.
El periodista denunció el hecho ante el módulo policial ubicado en el aeropuerto y aseguró que pedirá garantías para su seguridad.