El asesinato de Ricot Jean se suma a la de Dumesky Kersaint, periodista de Radio Télé Inurep, quien fue acribillado el 18 de abril en el municipio de Carrefour.
Este artículo fue publicado originalmente en sipiapa.org el 25 de abril de 2023.
Otro periodista fue asesinado en un lapso de 48 horas en Haití, el país más peligroso para ejercer el periodismo según un informe preliminar de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) difundido este martes.
El cuerpo de Ricot Jean, periodista de Radio-Télé Évolution Inter de Saint-Marc, localidad ubicada 73 km al norte de Puerto Príncipe, fue hallado en un descampado la mañana del martes 25 según Alcide Volcy, director de información de la emisora citado por el periódico Le Nouvelliste.
El matutino dijo que Jean fue secuestrado junto con un allegado la noche anterior por cuatro hombres armados y vestidos con uniformes de la Unidad Departamental de Mantenimiento del Orden (UDMO), cuerpo especializado de la policía haitiana, con el pretexto de ser detenidos.
Además de redactor de Évolution, la víctima era un reconocido animador cultural en Saint Marc y dirigía el programa «Jamè Dodo» todos los fines de semana.
El asesinato de Jean se suma a la de Dumesky Kersaint, periodista de Radio Télé Inurep, quien fue acribillado el pasado domingo 18 en el municipio de Carrefour, al sur de Puerto Príncipe, «mientras se preparaba para retomar sus actividades habituales» según Jacques Antoine Bazile, director ejecutivo de la estación.
La muerte de Kersaint ocurrió en el mismo lugar donde otra persona no identificada murió baleada. El autor o los autores de ese crimen habrían asesinado a Kersaint al reconocerlo por su profesión según el portal de noticias Vant Bèf Info.
Ambos crímenes se producen en momentos en que la SIP realiza de manera virtual su reunión de medio año.
El informe preliminar de la SIP sobre el estado de la libertad de expresión y de prensa correspondiente a Haití considera que ejercer el periodismo en este país «sigue siendo difícil, riesgoso y expone a los profesionales del oficio a condiciones precarias y de altísima vulnerabilidad».
En el período bajo evaluación, que comprende de octubre del año pasado a abril de este año, cuatro periodistas, ejecutivos de medios o trabajadores de la prensa fueron asesinados, otros cuatro fueron secuestrados y uno resultó herido.
«Estos números y las expresiones y denuncias de sindicatos, organizaciones sociales e internacionales revalidaron la condición del país como el más peligroso para ejercer el periodismo», señaló la organización.
Además, las dificultades para ejercer el oficio en Haití quedaron registradas en el informe «Estudio sobre el desarrollo de los medios de comunicación en Haití», publicado por la Unesco el pasado 10 de febrero.
El documento señala que los ataques contra la prensa son frecuentes y que sus perpetradores rara vez son llevados ante la justicia. También denuncia que los reporteros que cubren mítines políticos suelen ser atacados verbal o físicamente por manifestantes que los asocian con el bando contrario.