(IPYS/IFEX) – La tarde del 11 de agosto de 2004, un equipo reporteril del canal Globovisión fue agredido por simpatizantes del oficialismo mientras cubría un acto del gobierno de Hugo Chávez en los alrededores de la Vicepresidencia de la República, ubicada en el centro de Caracas y considerada una zona de alta seguridad bajo la […]
(IPYS/IFEX) – La tarde del 11 de agosto de 2004, un equipo reporteril del canal Globovisión fue agredido por simpatizantes del oficialismo mientras cubría un acto del gobierno de Hugo Chávez en los alrededores de la Vicepresidencia de la República, ubicada en el centro de Caracas y considerada una zona de alta seguridad bajo la custodia permanente de efectivos de la Guardia Nacional.
El equipo, integrado por la reportera Ana Karina Villalba y los técnicos Tony Vergara y Juan Camacho, fue perturbado cuando se disponía a colocar la señal microondas para realizar la transmisión. Los atacantes portaban tubos, aerosoles con productos químicos irritantes y armas de fuego.
Los técnicos fueron encañonados y obligados a bajar del vehículo. Al mismo tiempo, la unidad fue golpeada con tubos y varios objetos contundentes que destrozaron en parte la carrocería y todos los cristales del vehículo. Mientras esto sucedía, los técnicos fueron insultados y «rociados» con los aerosoles de químicos irritantes.
Tanto a Camacho como a Vergara le fueron sustraídos todos los objetos de valor que portaban, incluyendo dinero en efectivo, carteras y teléfonos celulares, así como todos sus documentos de identidad y partes del equipo de microondas.
«Nosotros sólo estábamos cubriendo el acto del gobierno en el que ratificaban la paz que reinará durante el proceso refrendario. Fue ahí cuando unas quince personas nos atacaron con armas de fuego y tubos y les echaron ácido encima a los muchachos», señaló Villalba.
Los efectivos de la Guardia Nacional se encontraban a pocos metros del suceso y sólo intervinieron cuando los agresores empezaron a dirigirse hacia ellos. Entonces lanzaron granadas lacrimógenas para detener el disturbio.
Los miembros del equipo de reporteros sufrieron heridas leves además de la sustracción de sus objetos personales. La unidad y componentes del equipo de microondas fueron dañados severamente.