(IPYS/IFEX) – El 15 de septiembre de 2003, alrededor de las 14.30 horas (hora local) en la zona de Villa Huayna Potosí, de la ciudad de El Alto, de La Paz, un periodista, dos fotógrafos y un chofer del periódico «La Razón» fueron golpeados por una turba de vecinos de El Alto, «gran parte de […]
(IPYS/IFEX) – El 15 de septiembre de 2003, alrededor de las 14.30 horas (hora local) en la zona de Villa Huayna Potosí, de la ciudad de El Alto, de La Paz, un periodista, dos fotógrafos y un chofer del periódico «La Razón» fueron golpeados por una turba de vecinos de El Alto, «gran parte de los cuales habían bebido alcohol», según denuncia el mismo periódico en su edición del día siguiente.
El equipo de prensa se disponía a retornar a La Paz ante la imposibilidad de dirigirse al altiplano paceño, pues tenía la misión de verificar si la carretera a las poblaciones de Copacabana y Achacachi se encontraban expeditas.
Según «La Razón», el vehículo que transportaba al equipo de periodistas fue interceptado por una turba, y alguien de ese grupo, «de aproximadamente 50 años de edad, que se encontraba en estado de ebriedad», irrumpió con un grito, diciendo, «¿Quiénes son ustedes? Estamos en un paro cívico».
El equipo de prensa al bajar del automóvil fue agredido al instante. «¡Hay que prender fuego a este vehículo! ¡Hay que romper sus vidrios!», vociferó la turba. Junto al equipo periodístico de este medio se encontraba el fotógrafo del periódico «El Diario», Reynaldo Saconeta, quien también fue agredido.
El fotógrafo Nicolás Quinteros logró huir de la turba y pidió auxilio a los efectivos policiales del Regimiento No. 5, acantonado en la zona de Villa Huayna Potosí. Entretanto, el periodista Johnny Salazar Socpaza y el conductor Edmundo Pardo soportaban la agresión física y verbal de los vecinos.
Los efectivos policiales -bajo el mando del mayor Gonzalo Portugal- atendieron de inmediato al pedido de socorro de Quinteros. Sin embargo, no llegaron a intervenir porque constataron que el equipo de prensa estaba aparentemente ileso.
El jueves 11 de septiembre el periodista de este periódico Hernando Flores sufrió otra agresión física en el coliseo de Radio San Gabriel de El Alto. Allí, el dirigente Rufo Calle golpeó con un chicote al periodista, junto con otros individuos que lo rodeaban. Estas agresiones se sumaron a otras que protagonizaron los dirigentes de la ciudad de El Alto el 22 de septiembre.
Frente a la agresión a cuatro trabajadores de este medio y ante la falta de garantías, «La Razón» decidió «no cubrir más las movilizaciones alteñas ni las de los campesinos del altiplano».