(AMARC/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de AMARC, con fecha del 8 de diciembre de 2004: AMARC saluda entrega de dos permisos a radios comunitarias indígenas El 6 de diciembre de 2004, los representantes legales de Radio Jën Poj de Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca, y Radio Uandarhi de Uruapan, Michoacán, recibieron […]
(AMARC/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de AMARC, con fecha del 8 de diciembre de 2004:
AMARC saluda entrega de dos permisos a radios comunitarias indígenas
El 6 de diciembre de 2004, los representantes legales de Radio Jën Poj de Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca, y Radio Uandarhi de Uruapan, Michoacán, recibieron de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) sus títulos de permiso para operar sus emisoras. Ambas radios son operadas por indígenas, en el caso de Jën Poj, atiende a comunidades mixes, y Uandarhi a la población purépecha migrante. Con la emisión de dichos permisos, por primera vez en la historia de nuestro país son grupos indígenas quienes tienen su propio permiso para operar y administrar sus radios.
La Asociación Mundial de Radios Comunitarias para América Latina y el Caribe (AMARC-ALC) valora positivamente este avance, pero ha manifestado su inquietud por la demora injustificada en la entrega de otros 8 permisos a radios comunitarias que también han cumplido con todos los requisitos.
El Gobierno Federal a través de la Secretaría de Gobernación se comprometió recentiemente a entregar todos los permisos de aquellas radios que cumplieran con todos los trámites y requisitos establecidos en la ley y su reglamento. Sin embargo, pese a que las 10 emisoras integradas en la red de AMARC se presentaron juntas, hasta el momento no hay ninguna respuesta por parte de la autoridad a las 8 peticiones restantes que ya cumplieron con los requisitos establecidos por la propia SCT en meses pasados.
El Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en el marco de una visita académica, sostendrá el 10 de diciembre una reunión con todas las partes involucradas. El motivo es evaluar el estado de los compromisos que asumió el Estado Mexicano ante dicho organismo en marzo de este año para solucionar la situación de las radios comunitarias en ese país.
AMARC-ALC considera necesario destacar el rol cumplido a lo largo de este proceso por la CIDH y la Relatoría para Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA). Desde la formulación de recomendaciones, la elaboración de Principios sobre Libertad de Expresión, el reconocimiento al rol de las radios comunitarias en el Informe del 2002, hasta la convocatoria a reuniones de trabajo conjuntas, los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos han desempeñado una notable actividad encaminada a transformar en una realidad tangible el mandato del artículo 13.3 de la Convención.
Asimismo, aplicar las enseñanzas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos cuando dice «si en principio la libertad de expresión requiere que los medios de comunicación social estén virtualmente abiertos a todos sin discriminación, o, más exactamente, que no haya individuos o grupos que, a priori, estén excluidos del acceso a tales medios, exige igualmente ciertas condiciones respecto de éstos, de manera que, en la práctica, sean verdaderos instrumentos de esa libertad y no vehículos para restringirla. Son los medios de comunicación social los que sirven para materializar el ejercicio de la libertad de expresión, de tal modo que sus condiciones de funcionamiento deben adecuarse a los requerimientos de esa libertad» (Opinión Consultiva 5/85 considerando 34).
AMARC-ALC quiere reconocer las muestras de voluntad del Gobierno Federal para cumplir con sus obligaciones en materia de derechos humanos. Una de ellas es la elaboración del Programa Nacional de Derechos Humanos (PNDH), en el cual se incluye la necesidad de que el Estado otorgue las garantías necesarias para que grupos ciudadanos accedan a operar frecuencias de radio y televisión. Sin embargo, resultaría fundamental que las líneas estratégicas establecidas en el PNDH se lleven a la práctica de manera inmediata.
Esta es la segunda ocasión, después de 39 años, que el Estado mexicano emite permisos a medios comunitarios. La primera fue en 1965, cuando se entregó a Radio Teocelo de Veracruz.