En 2011, José Antonio Torres fue arrestado al publicar una serie de informes sobre la mala gestión en la construcción del acueducto de Santiago de Cuba, y sobre la instalación del cable de fibra óptica entre Venezuela y Cuba.
(RSF/IFEX) – 16 de noviembre de 2012 – Reporteros sin Fronteras rechaza las represiones que han venido aumentado durante los últimos meses, y que contradicen las intenciones expresadas por el gobierno cubano en 2008 en los dos pactos internacionales sobre Derechos Humanos que firmó con la Organización de las Naciones Unidas que aun están por ratificarse: «Las esperanzas suscitadas por la liberación en 2010 de los prisioneros de la Primavera Negra están desvaneciéndose. La comunidad internacional debe denunciar este endurecimiento, y en particular los países de América Latina con quienes Cuba busca la integración. Ellos deben poner el tema del respeto de los derechos humanos y de la libertad de información como una prioridad en sus relaciones», dijo la organización.
José Antonio Torres, corresponsal en Santiago de Cuba (segunda ciudad más importante situada al este de la isla) para el diario oficial Granma, fue condenado en julio de 2012 a 14 años de cárcel por «espionaje» y fue despojado de su título universitario de periodista. En 2011, fue arrestado al publicar una serie de informes sobre la mala gestión en la construcción del acueducto de Santiago de Cuba, y sobre la instalación del cable de fibra óptica entre Venezuela y Cuba. Reporteros sin Fronteras fue informada que el periodista apelará su condena, pero teme que ello conduzca a que se le imponga una pena más grave.
Calixto Ramón Martínez Arias, periodista independiente y corresponsal del centro de información Hablemos Press, se encuentra en su sexto día de huelga de hambre para protestar en de contra las condiciones de detención en la cárcel de Valle Grande, a donde fue trasladado el 10 de noviembre pasado. Desde el 16 de septiembre de este año está encarcelado y enfrenta hasta tres años de prisión por «desacato» tras la publicación de la existencia de una epidemia de cólera y dengue antes que las autoridades cubanas lo hicieran.
“Calixto Ramón Martínez Arias lleva encarcelado ya demasiado tiempo. Hacemos un llamado a las autoridades cubanas para que liberen al periodista que no ha hecho más que ejercer su profesión», declaró Reporteros sin fronteras.
Estos últimos hechos ocurren en medio de una preocupante ola de represión que asecha a la isla desde los últimos meses. Constantemente los periodistas del centro de información Hablemos Press son objeto de amenazas y de detenciones arbitrarias. Roberto de Jesús Guerra Pérez, periodista y director de Hablemos Press y el periodista Jaime Leygonier de este mismo centro de información fueron interrogados y amenazados durante varias horas, el 1 y 8 de noviembre de 2012 respectivamente. Enyor Díaz Allen, corresponsal para Hablemos Press en Guantánamo, fue detenido en la mañana del martes 6 de noviembre de 2012 durante 77 horas, y todo su equipo de trabajo le fue confiscado (un computador, dos cámaras de fotos y un teléfono móvil).
El 7 de noviembre de 2012, 11 disidentes fueron a una estación de policía en busca de información sobre la situación de la abogada Yaremis Flores, detenida por «delitos contra el Estado» y los arrestados. Entre ellos estaba el bloguero y activista Antonio Rodiles. Rodiles se encuentra hoy en día en prisión preventiva por los cargos de «resistencia» que le imputan las autoridades, y se enfrenta a una condena de entre tres meses y un año de cárcel.
Tras esa primera oleada de detenciones, un segundo grupo de personas fue a esa misma estación de policía para averiguar sobre el paradero de los disidentes. Una vez más, 16 personas fueron detenidas por «desorden público e indisciplina social» acusados de hacer parte de una acción «deliberada y puesta en escena por las autoridades estadounidenses.» Entre los nuevos detenidos se encontraba la bloguera Yoani Sánchez.
Se trata de la segunda detención de Yoani Sánchez en los últimos dos meses. El pasado jueves 4 de octubre de 2012 en Bayamo, ya había sido arrestada junto con su esposo, el periodista independiente Reynaldo Escobar. Estuvo detenida durante 30 horas cuando se dirigía a cubrir el juicio del activista político español Ángel Carromero, involucrado en el accidente de tráfico del 22 de julio 2012 en el que la figura de oposición cubana, Oswaldo Paya perdió la vida. Tras su puesta en libertad al día siguiente, la bloguera declaró vía Twitter: «Durante detencion me negue a comer y a tomar cualquier liquido. 1er vaso de agua que me tome al llegar a casa como fuego en el esofago». Luego denunció los malos tratos que sufrió y que causaron, entre otras, un diente roto.
El 12 de noviembre de 2012, la CIDH (Corte Interamericana de Derechos Humanos) otorgó medidas cautelares Yoani Sánchez y su familia para garantizarles su vida y su integridad física, a raíz de una denuncia presentada por la bloguera contra Cuba por la vulneración sistemática de sus derechos y la negación de su libertad de circulación. Desde 2007 se le ha negado ya 20 veces la visa a esta bloguera. El 8 de noviembre de 2012, día mismo de la segunda detención de Yoani Sánchez, la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) la había nombrado vicepresidenta regional por Cuba de su Comisión de Libertad de Prensa e Información responsable de la supervisar la libertad de prensa en la isla.
Cuba firmó en 2008 el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el Pacto relativo a los derechos económicos, sociales y culturales.
