(AMARC/IFEX) – El 4 de agosto de 2004, la Radio Comunitaria de Restinga fue cerrada en un fuerte operativo de 12 agentes de Policía y funcionarios de ANATEL, el órgano regulador de las telecomunicaciones. Los funcionarios se presentaron con una orden judicial del Juez de la Primera Sala Criminal de Justicia Federal de Porto Alegre […]
(AMARC/IFEX) – El 4 de agosto de 2004, la Radio Comunitaria de Restinga fue cerrada en un fuerte operativo de 12 agentes de Policía y funcionarios de ANATEL, el órgano regulador de las telecomunicaciones.
Los funcionarios se presentaron con una orden judicial del Juez de la Primera Sala Criminal de Justicia Federal de Porto Alegre y entraron al local de la radio sin esperar la presencia de los responsables y abogados de la emisora. Desconectaron el trasmisor y el teléfono e incautaron todo el equipamiento.
La presidenta de la Asociación Radio Cultural y Comunitaria de Restinga, Marisa Godinho, ha informado que no recibió ninguna notificación previa y fue avisada por personas de la propia comunidad cuando los funcionarios ya estaban dentro: «estamos muy asombrados por la numerosa presencia de policías, una demostración de fuerza exagerada». A su llegada, un policía federal impidió su acceso al local y apenas le fue entregado una copia del acta de actuación.
Es el segundo cierre que sufre esta emisora en los últimos dos años, a pesar de tener en trámite una solicitud de autorización ante las autoridades. Centenares de expedientes se encuentran demorados en todo el país por la demora en los procedimientos administrativos, lo cual lo ha convertido en una de las trabas para el acceso de las comunidades y los grupos ciudadanos a las frecuencias.
Brasil tiene una de las legislaciones más restrictivas y discriminatorias en materia de radios comunitarias. Para AMARC, estas disposiciones impiden el libre ejercicio de la libertad de expresión al limitar su derecho a trasmitir a solamente un kilómetro desde el lugar de trasmisión y no autorizar el uso de publicidad y otros mecanismos de sostenibilidad como se les permite a otros operadores. Además, solo se permite el uso de una sola frecuencia para toda la radiodifusión comunitaria en Brasil de las miles disponibles en todo su territorio.