(RSF/IFEX) – El 3 de agosto de 2007 RSF se enteró, con preocupación, de que la fiscalía de varias ciudades, entre las que se encuentran Berlín, Munich y Hamburgo, están investigando a 17 periodistas, tras la publicación de documentos confidenciales procedentes de una comisión parlamentaria que investiga la lucha antiterrorista. «Estamos muy preocupados por el […]
(RSF/IFEX) – El 3 de agosto de 2007 RSF se enteró, con preocupación, de que la fiscalía de varias ciudades, entre las que se encuentran Berlín, Munich y Hamburgo, están investigando a 17 periodistas, tras la publicación de documentos confidenciales procedentes de una comisión parlamentaria que investiga la lucha antiterrorista.
«Estamos muy preocupados por el encausamiento de numerosos periodistas de los periódicos ‘Berliner Zeitung’, ‘Die Zeit’, ‘Die Welt’, ‘Der Spiegel’, ‘Süddeutsche Zeitung’, y otros medios de comunicación. En cualquier caso, esos profesionales no deben ser equiparados con delincuentes. Recordamos que es deber de los medios de comunicación investigar y dar a conocer cualquier información que contribuya al interés general. Por eso, es fundamental que el legislador proteja eficázmente el secreto de las fuentes, pilar del periodismo de investigación y de la libertad de prensa», ha declarado RSF.
«Estamos tanto más sorprendido por esta decisión porque, en febrero de 2007, el Tribunal Constitucional alemán condenó un registro efectuado en la sede de la revista ‘Cicero’, encausada por divulgar informaciones confidenciales. Esa jurisdicción recordó que la libertad de prensa está inscrita en la Ley Fundamental, y que «los registros y embargos en una investigación sobre miembros de la prensa, son ilegales si tienen como único, o principal, objetivo encontrar la identidad de un informador». En aquel momento, Reporteros sin Fronteras pidió que el artículo 353 (b) del código penal, que sanciona la «complicidad en divulgación de secretos de Estado», no se siga aplicando a los periodistas » (ver las alertas de IFEX del 2 de marzo de 2007 y el 24 de noviembre de 2005).
Según la Asociación de Periodistas Alemanes, DJV, desde 1986 se han abierto diligencias a 180 periodistas, por «complicidad en traición de secretos de Estado».