(RSF/IFEX) – En una carta dirigida a Nicolás Rodríguez Bautista, comandante del Ejército Nacional de Liberacion (ELN), RSF protesto contra un comunicado de este grupo armado que declara «objetivos militares» a los periodistas Guillermo Aguilar Moreno y Carlos Enrique Aristizabal. La organizacion pide al jefe del ELN que retire esta decision y que se comprometa […]
(RSF/IFEX) – En una carta dirigida a Nicolás Rodríguez Bautista, comandante del Ejército Nacional de Liberacion (ELN), RSF protesto contra un comunicado de este grupo armado que declara «objetivos militares» a los periodistas Guillermo Aguilar Moreno y Carlos Enrique Aristizabal. La organizacion pide al jefe del ELN que retire esta decision y que se comprometa a respetar el Artículo 3 de las Convenciones de Ginebra que protégé a las «personas que no participan directamente en el conflicto». En marzo de 1999, el ELN ya había declarado «objetivos militares» a los periodistas acusados de servir de «canal de difusion» para los paramilitares. Siete periodistas fueron secuestrados por el ELN el año pasado. «Ya es hora de que los grupos armados dejen de considerar los periodistas como objetivos y el control de la informacion como una puesta», declaro Robert Ménard, secretario general de RSF.
Los periodistas se han convertido en un blanco privilegiado de los grupos armados en la guerra a muerte que se libren las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC – paramilitares), y las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC – marxistas) y del ELN (guevarista). Según RSF, Carlos Castaño (AUC), Manuel Marulanda (FARC) y Nicolás Rodríguez Bautista (ELN) son tres de los veintidos predadores más peligrosos para la libertad de prensa en el mundo. Con treinta y tres periodistas asesinados desde 1991, Colombia es el país más peligroso del continente para los comunicadores sociales.
Según las informaciones recogidas por RSF, en un comunicado publicado el 11 de abril de 2001, el ELN declaro «objetivos militares» a Aguilar Moreno y Aristizabal, ex periodistas de la radio Armony Records, emisora basada en Cali. El grupo armado, que califica a los dos hombres de «informantes y colaboradores del gobierno», les prohibe ejercer su profesion. En julio de 1999, durante el secuestro por el ELN de 180 feligreses en una iglesia de Cali, Aguilar Moreno y Aristizabal lanzaron un programa especial para que los familiares de los rehenes pudieran transmitirles mensajes. Los dos periodistas afirman que recibieron varias amenazas en base a este programa. Éstas les forzaron a dejar la emisora y cambiar de domicilio en cuatro oportunidades (ver las alertas de IFEX del 16 de febrero y del 24 de enero de 2001). Una investigacion del DAS (Departamento Administrativo de Seguridad, policía), realizada a peticion del programa gubernamental para la proteccion de los periodistas, concluyo que sus vidas estaban amenazadas. Sin embargo, ninguna proteccion les fueron brindada por las autoridades.
En 2000, siete periodistas fueron secuestrados por el ELN, en general para forzar los medios a denunciar las exacciones cometidas por los paramilitares. El 30 de marzo de 1999, este grupo armado ya había declarado «objetivos militares permanentes» a los periodistas y los medios «que sirven de canal de difusion a la política» de los grupos paramilitares de extrema derecha. El ELN reivindico también el asesinato, el 16 de agosto de 1995, de Ivan Pelayo, director de Llanoramica Estéreo, emisora de Puerto Rondon (250 km. al noreste de Bogotá). Un comunicado abandonado en el lugar del crimen calificaba el periodista de «enemigo del pueblo y de la revolucion».
