(SPP/IFEX) – El SPP repudia la cobarde agresión de la que fueron víctimas los periodistas del Diario «La Nación», Gerardo Benítez e Ismael Villalba, por parte de efectivos de la Policía Nacional. En la mañana del 24 de junio de 2008, durante una protesta de organizaciones «Sin Techo» frente a la Secretaría de Acción Social […]
(SPP/IFEX) – El SPP repudia la cobarde agresión de la que fueron víctimas los periodistas del Diario «La Nación», Gerardo Benítez e Ismael Villalba, por parte de efectivos de la Policía Nacional.
En la mañana del 24 de junio de 2008, durante una protesta de organizaciones «Sin Techo» frente a la Secretaría de Acción Social (SAS) en Asunción, el periodista Benítez y el reportero gráfico Villalba fueron golpeados con patadas por los «cascos azules». Los efectivos policiales no pudieron ser identificados debido a la falta de cooperación del comisario Ireneo Giménez, según informó el diario «ABC Color» en su versión digital.
Benítez relató que se encontraba sobre la vereda, acompañando la manifestación de los «Sin techo» cuando la columna de efectivos de seguridad avanzó. Primero utilizaron los escudos para apartarlo y luego le propinaron puntapiés. «Yo giré para retirarme y cuando Ismael se dispuso a sacar fotos también le metieron patadas», comentó Benítez.
Villalba indicó que, al intentar tomar fotografías de los agresores, ellos continuaron propinando patadas a los dos periodistas. Además, «las veces que se acercaba y le intentaba tomar una foto, se tapaba el rostro con el casco», comentó el fotógrafo.
El comisario Giménez se responsabilizó por las acciones de los agresores pero se negó a identificar a los policías.
La comisión directiva del SPP manifiesta su plena solidaridad con los periodistas agredidos, y responsabiliza al gobierno nacional por la seguridad de los trabajadores de prensa. Además, exige las sanciones correspondientes para los agresores y sus jefes.
La organización insta finalmente a todas las y los periodistas a seguir denunciando este tipo de hechos cuando ocurrieren y a estrechar las filas de la organización para fortalecerla y frenar definitivamente las agresiones y amenazas que soportan los periodistas y otros trabajadores de prensa.