Para analizar el fallo sobre el caso del periodista Nelson Carvajal, IFEX ha hablado con Edison Lanza, Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
En un histórico fallo, la Corte Interamericana de Derechos Humanos responsabilizó al Estado colombiano por la muerte del periodista Nelson Carvajal en 1998. La sentencia señala que Colombia no solo falló en su deber de garantizar el derecho a la libertad de expresión de Carvajal, sino que también fracasó en el de proteger su derecho a la vida, dos consideraciones inéditas a nivel de la Corte en casos de crímenes contra periodistas.
En el marco de tan importante acontecimiento, conversamos con el abogado Edison Lanza, Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA), para conocer su opinión y analizar el impacto que puede tener esta sentencia en la región.
¿Qué opinión le merece el fallo de la Corte Interamericana sobre el caso del asesinato del periodista colombiano Nelson Carvajal?
La sentencia, a mi juicio, supone un avance importante en la lucha contra la impunidad de los crímenes contra periodistas. ¿Por qué? Porque una corte internacional condena a un Estado por la falta de investigación de un asesinato de un periodista y vincula esta impunidad persistente, en este caso tras 20 años sin ser identificados los autores intelectuales y materiales, con el derecho a la vida. Esto es, el deber de no solo proteger la vida, sino también investigar un asesinato de esta naturaleza.
También se condena al Estado por una violación del derecho a la libertad de expresión. Esto también es muy importante. En general, hasta el momento la Corte podía entender que no había violación a este derecho por parte del Estado si no se conocía si el autor era un actor privado o estatal. En este caso se desconoce, pero la sentencia considera al Estado responsable de todas formas porque se determinó que el asesinato de Carvajal fue para silenciarlo por sus informaciones sobre hechos de corrupción entre un alcalde y un empresario. La Corte determinó que ese fue el contexto y por tanto, que hubo una violación del articulo 13 relativo a la libertad de expresión.
Así, la Corte establece que silenciaron a Carvajal por estos hechos. Es una sentencia muy trascendente con estos dos puntos de gran relevancia. Es la primera vez que la Corte determina esta lectura.
¿Cómo juega este dictamen en futuros casos?
Lo interesante es que ahora tendremos jurisprudencia específica. Es un avance importante.
Se debe destacar que la sentencia establece claramente como un indicador de la falta de investigación diligente en el caso de crimines contra periodistas que no se llegue a una solución efectiva y se identifique y sancionen a los autores en forma oportuna.
También es importante que se considera al Estado responsable de que familiares y testigos del crimen tuvieran que exiliarse del país tras recibir amenazas durante la investigación en tanto que exigían justicia.
Gracias a este caso, los Estados van a tener mucho más presente que estarán violando derechos fundamentales por no investigar un crimen de un periodista de manera firme y oportuna, por no proteger a testigos y familiares o por no llegar a una sanción en plazos razonables.
Quedó claro que todo lo anterior constituyen violaciones al derecho a la vida y a la libertad de expresión. Creo que por eso tenemos que celebrar este fallo.
¿Creé que le faltó algo al fallo de la Corte?
Si bien todo lo anterior es motivo de celebración por la firmeza del fallo, desde la Relatoría entendemos que hubo irregularidades que la Corte no acogió en el marco de la investigación. Por ejemplo, un testigo clave fue asesinado, hubo amenazas a los operadores de justicia y creemos que el Estado no protegió adecuadamente a estas personas.
Creemos que estos hechos tuvieron mucho que ver con que la investigación se frustrara. Esto no lo tomó en cuenta la Corte, pero, bueno, es un fallo alentador sobre todo ante la lamentable cantidad de casos sin resolver de asesinatos contra periodistas.
Esperamos que este fallo ayude a que se hagan más y mejores investigaciones y que se cumpla con la debida diligencia en esos casos.