La SIP rechazó los recientes ataques del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra la prensa y expresó preocupación por el estilo del primer mandatario que podría incitar actos de violencia contra informadores y medios.
Este artículo fue publicado originalmente en sipiapa.org el 3 de julio de 2017.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) rechazó los recientes ataques del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra la prensa y expresó preocupación por el estilo del primer mandatario que podría incitar actos de violencia contra informadores y medios.
En respuesta a los nuevos agravios del Presidente contra medios de comunicación y periodistas, Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, recordó un informe reciente de la SIP, según cual si bien resulta común que exista tensión entre la prensa y la Casa Blanca, «la retórica del gobierno de Trump no tiene precedentes y amenaza con socavar la capacidad de los medios de comunicación de informar al público sobre las actividades del nuevo gobierno y sus planes para el futuro del país».
La insistencia de la SIP es en referencia al tuit que el presidente Trump publicó en su cuenta el 2 de julio. Se trata de un corto video de un montaje de 2007 donde aparece él junto a las cuerdas de un cuadrilátero de lucha libre pegándole a otro hombre en el suelo, cuyo rosto fue reemplazado con el logotipo de la cadena CNN.
La grabación concluye con la aparición del emblema FNN en referencia a Fraud News Network, «Red de Noticias Fraudulentas». Un día antes Trump dijo a un grupo de seguidores que CNN era «periodismo basura».
«No puede resultar cómico que el Presidente pueda estar incitando a la violencia contra periodistas y medios, pues además de afectar su relación con la prensa, aleja a gran parte de una sociedad que también entiende que la Primera Enmienda cuestiona el uso de las burlas para combatir las críticas», expresó Rock, director del portal mexicano de noticias La Silla Rota.
Trump ha criticado en numerosas ocasiones a CNN, NBC, ABC, CBS y los diarios The New York Times y The Washington Post como «medios de noticias falsas», «deshonestos» y «enemigos del pueblo estadounidense», términos que utilizó desde cuando era candidato a la Presidencia para denigrar y contrarrestar información que estima desfavorables.
CNN expresó en un comunicado que «es un día triste cuando el presidente de Estados Unidos alienta la violencia contra periodistas». La semana pasada la cadena aceptó la renuncia de tres periodistas por considerar que un artículo de su autoría publicado en CNN.com sobre posibles vínculos financieros entre Rusia y la campaña electoral de Trump, no cumplía con los estándares de calidad y rigurosidad de la cadena.
En mayo, la comediante Kathy Griffin fue despedida por CNN como copresentadora del programa de víspera de Año Nuevo por un video en el que agarraba por el cabello una cabeza de Trump ensangrentada que simulaba una decapitación.
Hace pocos días, Trump agravió de manera personal a los presentadores del programa matutino Morning Joe de la cadena MCNBC, Joe Scarborough y Mika Brzezinski.
La SIP ha manifestado preocupación por la falta de transparencia del gobierno, caracterizado por ofrecer escasas conferencias de prensa en comparación con administraciones anteriores, así también por su insinuación a establecer regulaciones sobre el uso de fuentes anónimas contra periodistas y la aplicación de leyes de líbelo contra los medios, que afectarían directamente la libertad de prensa.