El periodista James Risen recibió una citación que le ordena comparecer en el juicio de un ex agente de la CIA y en caso de que se niegue, corre el riesgo de una pena de prisión por "desacato a la Corte".
(RSF/IFEX) – 26 de mayo de 2011 – James Risen, del periódico «The New York Times», recibió el 23 de mayo de 2011 una citación que le ordena comparecer el próximo 12 de septiembre en el juicio de Jeffrey Sterling. Este ex agente de la CIA es acusado de haber filtrado información confidencial a varios periodistas, entre ellos James Risen, para quien se trata de la cuarta comparecencia ante la justicia en circunstancias similares. En el documento que recibió el periodista, el Departamento de Justicia considera a James Risen como testigo y le pide revelar su información y sus fuentes ante el jurado. En caso de que se niegue, corre el riesgo de una pena de prisión por «desacato a la Corte».
«Una orden como esta representa una grave amenaza para la libertad de prensa y la protección de las fuentes. Asimismo, concierne a todo el gremio, no sólo a James Risen. Ninguna fuente aceptará revelar información a la prensa sabiendo que no está protegida. Reporteros sin Fronteras pugna desde hace tiempo por una «ley escudo» federal en la materia. Treinta y seis Estados de la Unión y el Distrito de Columbia cuentan actualmente con una legislación propia que garantiza a los periodistas, en diversos grados, la protección de sus fuentes. Una legislación federal similar debe ser adoptada en nombre de la libertad de informar, contemplada en la Constitución de los Estados Unidos de América», declaró la organización.
Este caso se vuelve aún más absurdo si se considera el importante resurgimiento de otro caso relacionado con las fuentes, registrado el mismo día en que James Risen recibió la citación. Thomas M. Tamm, un ex empleado del Departamento de Justicia, declaró a «Newsweek» ser una de las fuentes informativas de un artículo que revelaba que el ex presidente George W. Bush ordenó a la Agencia de Seguridad Nacional (National Security Agency, NSA por sus siglas en inglés) la escucha telefónica y la vigilancia informática de los ciudadanos, fuera de todo marco legal. Estas maniobras de espionaje a gran escala fueron reveladas por «The New York Times» en 2005, en notas firmadas por James Risen y Eric Lichtblau, pese a las grandes presiones que la Casa Blanca ejerció sobre la redacción en ese entonces. Ahora, el Departamento de Justicia acaba de dar a conocer que su ex empleado no será enjuiciado.
«La administración federal demuestra una total incoherencia. No puede a la vez exigir que un periodista traicione a sus fuentes y renunciar a toda acción judicial contra uno de sus empleados que asegura haber filtrado el mismo tipo de información a los medios de comunicación que el ex funcionario de la CIA Jeffrey Sterling. El Secretario de Justicia, Eric H. Holder, debe dar explicaciones públicamente sobre este punto. Le pedimos, en estas condiciones, que anule cuanto antes la citación enviada a James Risen», agregó Reporteros sin Fronteras.
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