Las autoridades locales han dicho que dos desconocidos interceptaron al periodista independiente cuando regresaba a su casa, le dispararon varias veces y huyeron en una moto.
(FLIP/IFEX) – La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) denuncia y rechaza el asesinato del periodista Luis Eduardo Gómez ocurrido el 30 de junio de 2011 en el municipio de Arboletes, en la región de Urabá, al noroccidente de Antioquia, en la frontera con el departamento de Córdoba.
Los hechos sucedieron cuando el periodista regresaba a su casa en el barrio El Deportivo en horas de la noche. Las autoridades locales dijeron a la FLIP que dos desconocidos interceptaron al periodista, le dispararon varias veces y huyeron en una moto. Gómez era un periodista independiente de 70 años que realizaba trabajos para diarios como «El Heraldo de Urabá» y «Urabá al Día», y para varias entidades públicas.
Gómez cubría últimamente temas relacionados con el turismo y el medio ambiente. La FLIP no tenía reportados casos de amenazas en su contra. El periodista era testigo en la Fiscalía en casos de parapolítica en la región y su hijo y colaborador había sido asesinado hace dos años en circunstancias que las autoridades no han esclarecido. El periodista desde entonces se había apersonado de la investigación por la muerte de su hijo y exigía a las autoridades avances en la investigación.
Un periodista de la zona que pidió mantener su nombre en reserva dijo a la FLIP: «Luis Eduardo era independiente y un periodista muy crítico. Estuvo por muchos años investigando el manejo de recursos públicos de la alcaldía, además de la muerte de su hijo.» El ex-alcalde de Arboletes, Gustavo Germán Guerra, fue capturado por ese proceso de parapolítica en marzo de 2010.
Por otro lado, en comunicación con la FLIP, Esteban Rebolledo, secretario de gobierno de Arboletes señaló: «Desconocemos los móviles del asesinato de Gómez, un grupo especial de Montería adelanta la investigación (. . .) Arboletes era un pueblo pacífico y no entendemos qué está pasando. En 72 horas ya van dos asesinatos».
En la zona del norte del Urabá (departamentos de Antioquia, Chocó y Córdoba) operaban los paramilitares comandados por alias «El Alemán», quien fue además uno de los gestores del proyecto político: «Uraba, Grande, Unido y en Paz». Este proyecto fue una iniciativa de los paramilitares para poner alcaldes concejales en varios municipios de la región.
Con la desmovilización del Alemán varios paramilitares que no se desmovilizaron formaron bandas criminales que continúan operando en la zona. Otro periodista que prefirió reservar su nombre le dijo a la FLIP: «Se está desbordando la violencia de Córdoba. La gente está muy nerviosa. Esas bandas no tienen quien las dirija, andan como cabo suelto. Cualquier información que les incomoda, van matando. Es un lío para grabar una entrevista. Nadie quiere hablar por miedo y tenemos que autocensurarnos».
El asesinato del periodista se dio tres días después de que fuera asesinado José Vicente Botero, veedor y líder comunitario de Arboletes, quien había recibido con anterioridad amenazas de grupos paramilitares. Curiosamente Botero y Gómez eran testigos en los procesos por parapolítica que se adelantan en la región.
La FLIP lamenta y rechaza el asesinato de Gómez y manifiesta su preocupación por la situación de violencia y autocensura que está viviendo la prensa en la región de Urabá. Se le solicita a la Policía y a la Fiscalía adelantar, en la mayor brevedad, las investigaciones pertinentes que permitan identificar y sancionar a los responsables. Igualmente, extiende su solidaridad a los periodistas de Urabá ante la difícil situación que están viviendo y los invita a que denuncien cualquier amenaza de la que sean víctimas.