Comunicado de prensa — Para difusion inmediata París, 17 de febrero del 2000 Colombia – Europa Gira en las capitales europeas de los representantes del gobierno colombiano y de la guerrilla Reporteros sin Fronteras denuncia que se siga asesinando y secuestrando periodistas durante las negociaciones por la paz Con motivo de su gira en varias […]
Comunicado de prensa — Para difusion inmediata París, 17 de febrero del 2000
Colombia – Europa
Gira en las capitales europeas de los representantes del gobierno colombiano y de la guerrilla
Reporteros sin Fronteras denuncia que se siga asesinando y secuestrando periodistas durante las negociaciones por la paz
Con motivo de su gira en varias capitales europeas, entre ellas Madrid, Reporteros sin Fronteras (RSF) se dirige a Víctor Ricardo, Alto Comisionado para la Paz del gobierno colombiano, y Raúl Reyes, portavoz de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Mientras ambas partes emprendieron negociaciones para poner fin a los treinta y cinco años de guerra civil que conoce Colombia, la organizacion internacional de defensa de la libertad de prensa pide a los actores del conflicto que «dejen de considerar que los periodistas son objetivos militares y que la informacion ha de ser objeto de una tentativa de control a toda costa». En una carta dirigida a Raúl Reyes, RSF afirma estar «sumamente preocupada por las últimas declaraciones de Manuel Marulanda, dirigente de las FARC, y por el secuestro del periodista Guillermo Cortés, director del consejo editorial del telenoticiero Hora Cero.».» En otra carta enviada a Víctor Ricardo, la organizacion expresa su preocupacion por «los atentados contra la libertad de prensa perpetrados por algunos miembros del ejército colombiano, así como por los presuntos vínculos que éstos pudieran mantener con las fuerzas paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que han sido autoras de varios asesinatos de periodistas.»
En su carta dirigida al delegado de las FARC, RSF «condena las declaraciones de Manuel Marulanda». Éste afirmo el pasado 29 de enero que los directores de medios de comunicacion colombianos tenían «muchas deudas» con las FARC antes de agregar: «eso tenemos que cobrarlo». Unos días después acuso a los mismos empresarios de prensa de «estar al servicio de los grandes monopolios» y de presentar de manera
«intencionalmente parcializada» la informacion relativa a las FARC. «Las proclamas de este tipo solo pueden tener como resultado obligar a los periodistas a autocensurarse para no se sospeche que apoyan «al bando contrario» y para evitar las represalias» denuncia RSF que recuerda que «en junio de 1997 las FARC ya habían declarado que los periodistas que «hiciesen la apología de las actividades del ejército» serían considerados «objetivos militares».» La organizacion internacional de defensa de la libertad de prensa estima que esta forma de razonar es la que ha conducido a miembros de las FARC a asesinar en el Departamento de Huila, el 3 de diciembre de 1999, a Pablo Emilio Medina, operador de TV Garzon. Este periodista, que había venido a cubrir la ofensiva de las FARC en Gigante (a 260 km. al sur de Bogotá), murio cuando se dirigía a esa localidad acompañado por un miembro de las fuerzas del orden.
Siempre en la misma carta dirigida a Raúl Reyes, RSF condena también el secuestro, el pasado 22 de enero por presuntos miembros de las FARC, de Guillermo Cortés, ex director del noticiero «NTC», de la revista Cromos y actual director del consejo editorial del noticiero «Hora Cero». La organizacion recuerda que, en el transcurso de los dos últimos años, el grupo armado ha secuestrado a diecisiete periodistas, «casi siempre a fin de obligar a los medios de comunicacion a difundir comunicados de prensa o denunciar las exacciones perpetradas por los paramilitares.» «Estos secuestros no solamente constituyen una traba a la libertad de prensa, sino también una violacion flagrante del Artículo 3 de la Convencion de Ginebra que condena el hecho de tomar como rehenes a las «personas que no participan directamente en las hostilidades», entre las cuales se encuentran los periodistas» denuncia la organizacion. Al considerar que «las repetidas violaciones de la libertad de prensa por parte de las FARC son incompatibles con la búsqueda de la paz en Colombia», RSF pide al grupo armado que «deje de considerar que los periodistas son objetivos militares y que la informacion ha de ser objeto de una tentativa de control a toda costa», que «libere inmediatamente a Guillermo Cortés» y que «ponga un término a los secuestros repetidos de periodistas.»
En otra carta dirigida a Víctor Ricardo, RSF recuerda que seis de los nueve periodistas quienes salieron del país lo hicieron aparentemente «a causa de las amenazas proferidas por las AUC o por algunos miembros de las fuerzas armadas que tratan de controlar la informacion en las zonas de conflicto donde se enfrentan con las guerrillas.» «Los casos de Carlos Pulgarín, corresponsal de El Tiempo en Montería (Departamento de Cordoba), y de Jorge Rivera Sena, corresponsal del diario El Universal en el Departamento de Bolívar, plantean la cuestion de las colusiones entre el ejército y los grupos paramilitares» afirma RSF. Los dos periodistas fueron acusados por oficiales del ejército de ser «jefes de prensa de la guerrilla», antes de que fueran agredidos o secuestrados por presuntos miembros de las AUC o por «desconocidos». Carlos Pulgarín y Jorge Rivera Sena habían publicado informaciones sobre las exacciones cometidas por las AUC o por las pérdidas en vidas humanas que había registrado esta organizacion paramilitar. Las repetidas amenazas y agresiones han obligado a estos dos periodistas a salir de Colombia. Carlos Pulgarín, que se refugio en Perú, ha recibido de nuevo amenazas en este país.
En su carta al Alto Comisionado para la Paz del gobierno colombiano, RSF también se pregunta «cuál puede ser la posible responsabilidad del ejército en dos de los siete asesinatos de periodistas que se perpetraron en 1999.» Jaime Garzon, el humorista y periodista de la emisora Radionet y del canal Caracol Television, fue asesinado el 13 de agosto de 1999 en Bogotá por dos hombres que circulaban en una moto. Habida cuenta de que este célebre profesional era partidario de que se entablaran negociaciones entre los poderes públicos y la guerrilla del Ejército de Liberacion Nacional (ELN), algunos observadores sospechan que ciertos miembros de los servicios de informacion militar podrían estar implicados en su asesinato. Guzmán Quintero Torres, jefe de redaccion del diario local El Pilon y corresponsal del canal de television regional Telecaribe en Valledupar (Departamento de César), fue asesinado el 16 de septiembre de 1999, después de que se hubieran denunciado en su periodico las exacciones perpetradas en esa zona por el ejército y los paramilitares.
Estimando «que el establecimiento de una paz duradera en Colombia exige que todas las partes del conflicto respeten y hagan respetar la libertad de prensa», RSF concluye su carta a Víctor Ricardo pidiendo al gobierno colombiano que :
– dé instrucciones claras al ejército para que los periodistas no sean considerados como objetivos militares y para que la informacion no sea objeto de tentativas de control a toda costa;
– tome las medidas necesarias para sancionar a los militares que sean culpables de ejercer presiones sobre los periodistas, y a este respecto la Organizacion señala que el coronel Miguel Angel Cárdenas, comandante de la 11ª brigada, fue quien acuso a Carlos Pulgarín de ser un «jefe de prensa de la guerrilla»;
– aplique a la mayor brevedad el plan de proteccion para los periodistas amenazados, que el Presidente Andrés Pastrana se comprometio públicamente a establecer el 5 de mayo de 1999;
– inicie una investigacion profunda sobre los vínculos entre el ejército y los militares, así como sobre sus repercusiones en la libertad de informacion, basándose en los casos de Jorge Rivera Sena y Carlos Pulgarín.
Los representantes del gobierno colombiano y de la guerrilla llegaron a Estocolmo el pasado 2 de febrero. Prosiguieron su gira europea en Noruega e Italia y tienen previsto partir con destino a Suiza y España. El objetivo de esta gira es «recoger experiencias sobre el desarrollo economico y social que puedan ser aplicadas en Colombia», explico el ministro de Asuntos Exteriores colombiano, el Sr Guillermo Fernández de Soto.