(SPP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa del SPP, con fecha del 15 de noviembre de 2006: Con métodos nazi-fascistas el gobierno pretende desentenderse del caso de la desaparición de Enrique Galeano El 4 de febrero, secuestraron y desaparecieron al periodista Enrique Galeano. Un mes y medio antes, [Galeano] tuvo vigilancia policial […]
(SPP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa del SPP, con fecha del 15 de noviembre de 2006:
Con métodos nazi-fascistas el gobierno pretende desentenderse del caso de la desaparición de Enrique Galeano
El 4 de febrero, secuestraron y desaparecieron al periodista Enrique Galeano. Un mes y medio antes, [Galeano] tuvo vigilancia policial en su domicilio, ordenada por el diputado Magdaleno Silva y el comisario Osvaldo Núñez. Sin embargo, la Policía cerró el caso en torno de una presunta «fuga» y la Fiscalía General del Estado no ha investigado y procesado al comisario y a los agentes policiales, quienes niegan el hecho, ni al diputado Magdaleno Silva.
El 6 de octubre pasado, el presidente Duarte Frutos se comprometió a prestar especial interés al caso y el Ministro del Interior, Rogelio Benítez, admitió la guardia policial irregular y dudaba del libreto policial.
La desaparición del compañero Galeano se produjo en un escenario de mafias y terrorismo de Estado que ya a ha matado 50 personas y desaparecido a cuatro, sólo en Yby Yaú.
Sin embargo, ante la petición de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, de conocer el paradero del periodista desaparecido Enrique Galeano, el gobierno y los organismos del Estado no dieron respuesta. En la contestación a la CIDH, el gobierno remitió documentación de la Corte Suprema de Justicia, de la Procuraduría General de la República, de la Fiscalía General del Estado y de la Comandancia de la Policía Nacional.
El procurador general de la República, Nelson Mora, sostiene en su informe que se ha descartado que el caso se trate de desaparición forzada, señalando que la principal pista ahora es un correo electrónico [presuntamente] firmado por Galeano, que indicaría que el mismo se encuentra en Argentina, y concluye que «no se llegó a la verificación real de la existencia de un hecho punible, por lo que la denuncia de la desaparición forzada (. . . ) carece de sustento fáctico».
El principal argumento esgrimido por el gobierno se basa en un «perfil psicológico» de Galeano fabricado a partir de una única entrevista realizada hace años por una organización no gubernamental obtenida, sin autorización, por el Ministerio Público.
El así llamado «perfil psicológico» concluye de manera tendenciosa que Galeano tendría «un patrón comportamental sistemático y estable de a) Conducta de fuga y desaparición; b) Actividades al margen de la ley; c) Sentimientos depresivos de rabia e indignación y d) Marcada identificación con la vida y la cultura de la calle…»
Este documento no sólo es discriminativo y vejatorio para la víctima sino que pone al desnudo el método y concepción fascista con que el Ministerio Público busca criminalizar la condición de pobreza de la víctima en una actitud totalmente opuesta a las concepciones humanistas y democráticas.
Pero es el procurador general Nelson Mora quien transgredió todos los límites en su informe al desconocer por completo y omitir señalar los hechos de amenazas, amedrentamientos, la guardia policial irregular constatada y el hecho de encontrarse, Enrique Galeano, en situación de peligro en el epicentro de una región dominada por la mafia.
La hipótesis del gobierno fundada en que Galeano habría «tomado la decisión de huir del país», abandonando a su familia de cuatro personas de la cual es sustento económico, por tener una «tendencia a la desaparición», es de tal gravedad que genera una alarmante sospecha sobre las verdaderas intenciones del gobierno con respecto a esclarecer la desaparición del periodista.
En síntesis, el Gobierno no respondió a la CIDH sobre el paradero de Enrique Galeano; fabricó un «perfil psicológico» tendencioso, omitió analizar la situación real de peligro vivida por Galeano en el momento de su desaparición y su informe revela profundas contradicciones con las declaraciones del presidente Duarte Frutos y el ministro del Interior Rogelio Benítez.
Por la gravedad de la respuesta del gobierno, el SPP ha decidido:
– Hacer público el informe del procurador general de la República, Nelson Mora;
– Remitir a las Comisiones de Derechos Humanos de las Cámaras de Senadores y Diputados la respuesta del gobierno a fin de solicitar la interpelación de los funcionarios involucrados en la confección del informe;
– Rechazar el informe del gobierno, presentado por el procurador general Nelson Mora, por falaz, indignante y atentatorio a los derechos fundamentales de las personas como el derecho a la libertad, a la seguridad y el derecho a la vida;
– Ratificar que el caso del compañero Enrique Galeano se trata de una desaparición forzada, por lo que el Estado está obligado a su búsqueda hasta encontrarlo;
– Seguir exigiendo la investigación hasta lograr el esclarecimiento del caso y el juicio y castigo de los responsables de este crimen de lesa humanidad;
– Deplorar el intento de los organismos del Estado y del gobierno de encubrir a los culpables y cubrir con el manto de la impunidad este hecho;
– Manifestar nuestro enérgico repudio al método y la concepción nazi-fascista empleados por el Ministerio Público, el Ministerio del Interior, la Procuraduría de la República y la Policía, que han llevado a entronizar en nuestro país el terrorismo de Estado.
Comisión Directiva
Sindicato de Periodista del Paraguay (SPP)
