Los periodistas continúan enfrentando amenazas, encarcelamiento, intimidación y asesinatos, según "Ataques a la Prensa," un informe anual lanzado por el CPJ.
(CPJ/IFEX) – Nueva York, 15 de febrero de 2011 – Las instituciones globales y regionales responsables de proteger la libertad de prensa están fracasando en el cumplimiento de su mandato mientras los periodistas continúan enfrentando amenazas, encarcelamiento, intimidación y asesinatos, según Ataques a la Prensa, un informe anual lanzado hoy por el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
«Mientras que la ley internacional garantiza el derecho a la libertad de expresión, los periodistas no pueden contar con una vigorosa defensa de estos derechos», aseguró Joel Simon, director ejecutivo del CPJ. «La reciente represión y persecución sin precedentes de periodistas en Egipto, por ejemplo, proporciona a las instituciones globales y regionales una ocasión propicia para que se manifiesten y actúen enérgicamente en defensa de la libertad de prensa».
Ataques a la Prensa es uno de los informes más exhaustivos sobre las condiciones de la libertad de prensa en el mundo, con análisis minuciosos de los expertos regionales del CPJ sobre los factores claves que contribuyen a obstruir el trabajo de la prensa. El estudio incluye un informe especial sobre la naturaleza invisible de los ataques en Internet destinados a restringir a periodistas que trabajan en la Web, incluyendo vigilancia en línea, software malicioso y la eliminación de sitios de noticias Web.
El CPJ señaló que un enfoque débil e indiferente para defender la libertad de prensa aqueja a instituciones como las Naciones Unidas, la Organización de los Estados Americanos y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, entre otras. «Mientras que los decididos relatores especiales de varias instituciones combaten la violencia contra los medios, sus esfuerzos se ven frustrados por una voluntad política vacilante para garantizar la libertad de prensa,» explicó Simon.
Con un prólogo por Riz Khan, conocido presentador de la cadena Al Yazira, el informe ofrece un panorama de las condiciones de los medios en más de 100 países, con datos sobre periodistas caídos en cumplimiento de su labor informativa (44) y encarcelados por su trabajo (145) en 2010. Las tendencias regionales identificadas por el CPJ incluyen:
África:
Un aumento del periodismo investigativo ha conducido a gobiernos de la región a reprimir a reporteros, particularmente los que informan sobre el suministro de servicios básicos y sobre el uso de dinero público. De Camerún a Sudáfrica, las autoridades están moviéndose agresivamente para desenmascarar a fuentes periodísticas confidenciales, criminalizar la posesión de documentos gubernamentales y tomar represalias contra periodistas de investigación. Todo esto ocurre mientras gobiernos en todo el continente, bajo presión de países donantes, están prometiendo más tranparencia y rendimiento de cuentas.
Américas:
Décadas después de que la democratización se extendió por la región, un aumento en los casos de censura se percibe en toda América Latina, ocasionado por la represión gubernamental, la interferencia judicial y la intimidación de grupos criminales. En algunos países, el clima de impunidad perpetúa un ciclo de violencia y autocensura. En otros, los gobiernos abusan de los recursos gubernamentales para silenciar los informes críticos, y figuras poderosas utilizan con frecuencia tribunales politizados para pasar por encima de garantías constitucionales sobre libertad de expresión.
Asia:
Con una mezcla de violencia y represión oficial, la censura en Asia asume diversas formas. Las políticas chinas contra los medios se están blindando más, aun cuando periodistas locales ponen a prueba las disposiciones diarias procedentes del Departamento de Propaganda Central. Democracias asiáticas como Tailandia, las Filipinas e Indonesia se muestran incapaces de revertir la impunidad en los casos de crímenes contra periodistas, mientras que en Sri Lanka los acuerdos de paz nunca se materializaron para los periodistas. Pakistán fue el país más letal para periodistas en 2010.
Europa y Asia Central:
Nuevas y sutiles formas de censura se están haciendo presentes en la región para contrarrestar el aumento de periodismo electrónico, especialmente en Rusia y las otras antiguas republicas soviéticas. Estos incluyen el uso estratégico de ataques tecnológicos y la desactivación, sin dejar rastros, de sitios Web de medios independientes. La violencia física ya empleada en varios países para acosar e intimidar a periodistas que trabajan en medios tradicionales ahora también se extiende a los blogueros. Mientras tanto, los periodistas se enfrentan a restricciones y posible castigo de leyes de difamación y disposiciones contra el extremismo.
Medio Oriente y África del Norte:
En toda la región, gobiernos están confundiendo cobertura esencial de contra-terrorismo con el propio terrorismo, alegando motivos de seguridad nacional para reprimir noticias y opiniones consideradas desfavorables. De Egipto a Turquía, se aprobó legislación sobre seguridad nacional que criminaliza la cobertura sobre el terrorismo y temas políticos sensibles. Irán lidera la región en abusos de acusaciones anti-estado y de Sudán hasta Bahréin, las autoridades apelan a las amenazas, la persecución y la restricción de circulación para limitar la cobertura y ocultar las actividades controvertidas y políticas defectuosas.