Sobre el cuerpo de la periodista Jineth Bedoya Lima está tatuada la guerra que, así como ella, han vivido miles de víctimas en el país. En su mirada está enclavada su historia y en sus palabras está representada la dignidad de una sobreviviente que lucha por la verdad y la justicia.
Este artículo fue publicado originalmente en flip.org.co el 25 de mayo de 2016.
Sobre el cuerpo de la periodista Jineth Bedoya Lima está tatuada la guerra que, así como ella, han vivido miles de víctimas en el país. En su mirada está enclavada su historia y en sus palabras está representada la dignidad de una sobreviviente que lucha por la verdad y la justicia en su caso y en el de muchas otras mujeres.
En el año 2014 en un acto público, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos proclamó el Decreto 1480 que estableció este día -25 de mayo – como el Día Nacional por la Dignidad de Víctimas de Violencia Sexual-. La fecha simboliza el arduo trabajo de la periodista Jineth Bedoya Lima, quien hace 16 años, fue raptada en la entrada de la cárcel La Modelo de Bogotá cuando iba a entrevistar a un paramilitar conocido con el alias de ‘El Panadero’. Antes de entrar al penal, 3 hombres la subieron a un auto, la drogaron y raptaron durante 16 horas, en donde fue torturada, violada y finalmente fue tirada en algún paraje en la vía al llano.
Ese día, Jineth inició un largo camino en la búsqueda de la verdad y de la justicia, que 16 años después aún no han llegado. Su caso, finalmente, fue declarado de lesa humanidad por la Fiscalía en septiembre de 2014 debido a que los ataques de los que fue víctima se debieron a su condición de periodista y de mujer.
“Yo opté por sobrevivir y opte por luchar por mi caso y seguir haciendo periodismo, opté por visibilizar miles de casos de mujeres que como yo quedamos cercenadas por la inoperancia de la justicia y por su impunidad” aseguró la periodista en su intervención en audiencia pública ante la CIDH el pasado 5 de abril de 2016.
Antes de los hechos del 25 de mayo, Jineth ya había sido víctima de múltiples amenazas y de un atentado contra su vida, pero el Estado no tomó las medidas necesarias para protegerla.
Para el 2009 Jineth comenzó una campaña llamada ‘No es hora de callar’ que, junto con otras mujeres, con historias similares de abusos trabajan por romper su silencio y denunciar los hechos de los cuales han sido víctimas.
En Colombia, según cifras de la Unidad de Víctimas se estima, que 3,4 millones de víctimas de las más de 6,9 millones que ha causado el conflicto armado colombiano en sus más de 50 años de historia, son mujeres. De estas, Medicina Legal ha informado que entre 1985 y 2014 se contabilizaron 6.900 casos de violaciones, el 90% de esos casos fueron hechos contra mujeres.
La Casa de la Mujer, reporta 489.678 casos de mujeres víctimas de violencia sexual entre 2001 y 2009 a nivel nacional. De éstas, 402.264, no denunciaron a sus agresores, es decir cerca del 82,15%, debido a la presencia de grupos armados en sus municipios.
“En el 2008 la Corte constitucional de Colombia envió un mensaje de urgencia a la Fiscalía General de la Nación exigiéndole que priorizara 183 casos de violencia sexual, entre ellos está el mío, es el número 62. Ocho años después ese llamado alcanza un 97% de impunidad, yo hago parte de esa cifra” aseveró la periodista.
La FLIP resalta la lucha que ha liderado Jineth como sobreviviente y como activista por los derechos de las mujeres víctimas de violencia sexual e igualmente reivindica la ardua tarea de muchas mujeres que buscan verdad y justicia.
Finalmente, insiste en esta fecha, una vez más, al Estado colombiano a que cumpla con sus obligaciones para combatir la impunidad en el caso de la periodista Jineth Bedoya Lima. Si bien este día es un gran paso en la lucha que ella ha liderado por el reconocimiento de sus derechos como víctima y el de otras mujeres, esto no puede llevar a que el Estado evada sus obligaciones de verdad y justicia.