(SIP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de la SIP: La SIP condena asesinato de periodista en Costa Rica También lamento otro crimen en Colombia, país en el que han asesinado a cuatro periodistas en las últimas dos semanas Miami (9 de julio del 2001) — La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) […]
(SIP/IFEX) – Lo que sigue es un comunicado de prensa de la SIP:
La SIP condena asesinato de periodista en Costa Rica
También lamento otro crimen en Colombia, país en el que han asesinado a cuatro periodistas en las últimas dos semanas
Miami (9 de julio del 2001) — La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condeno enérgicamente el asesinato del periodista Parmenio Medina, ocurrido el sábado 7 de julio en Santo Domingo de Heredia, Costa Rica, tres días después de que esta organizacion hemisférica visito el país centroamericano y pidiera a legisladores «mayores garantías y respeto a la libertad de prensa».
Medina, productor radiofonico y director del programa humorístico y de crítica política «La Patada», transmitido por Radio Monumental en San José, la capital costarricense, se caracterizo por la crítica humorística y la investigacion de actos de corrupcion en el país.
Tras condenar el asesinato y pedir la intervencion urgente de las autoridades para su esclarecimiento, el presidente de la SIP, Danilo Arbilla, dijo que «este hecho lamentable nos resulta triste y doloroso, ya que justamente la semana pasada estuvimos en San José donde mostramos nuestra satisfaccion de que los periodistas costarricenses no fueran blanco de la violencia, aunque pusimos énfasis en la ausencia de garantías legales y jurídicas que no permiten una plena libertad de prensa y de expresion».
Rafael Molina, presidente de la Comision de Libertad de Prensa e Informacion, dijo, después de la visita a Costa Rica el 2 y 3 de julio pasado, que la SIP estaba preocupada por el alto nivel de autocensura de parte de los periodistas debido al temor que origina una «industrial cantidad de demandas» en su contra.
Molina, director del semanario Ahora, Santo Domingo, República Dominicana, agrego que «lamentablemente este asesinato acarreará otro tipo de autocensura a la que los periodistas y medios costarricenses no estaban acostumbrados, por lo que es necesario una rápida intervencion de las autoridades para esclarecer el crimen y que recaiga todo el peso de la ley sobre los responsables».
En los últimos meses, Medina fue blanco de amenazas que denuncio oportunamente ante las autoridades y su casa fue baleada el pasado 9 de mayo por desconocidos que, según el propio periodista, intentaban amedrentarle. Dos días antes de su asesinato, Medina pidio a la policía descontinuar su proteccion porque creía que ya no era necesario.
Medina regresaba a su casa, en la localidad de Santo Domingo de Heredia, luego de grabar la edicion de «La Patada» para el domingo 8 de julio, cuando a las 4:20 p.m. cuatro hombres interceptaron su vehículo y le hicieron tres disparos a corta distancia. Medina fue acribillado a solo 25 metros de su hogar.
El gobierno costarricense condeno el homicidio y ofrecio a las autoridades judiciales todo su apoyo para esclarecerlo. El ministro de Seguridad Pública, Rogelio Ramos, descarto que el movil fuera el robo, en vista de las primeras investigaciones, y aseguro que se trato de un crimen bien planeado.
Recientemente, el programa de Medina fue blanco de severas presiones por sus críticas al manejo de la emisora catolica Radio María y el periodista se vio forzado a recurrir, mediante el amparo, a la Sala Constitucional costarricense para evitar ser objeto de la censura o, en su defecto, la total prohibicion de transmitir el espacio radial. La Sala Constitucional dio la razon a Medina y ordeno mantener las transmisiones de «La Patada».
La SIP también condeno otro crimen en contra de un periodista en Colombia, el cuarto ocurrido en las dos últimas semanas. Jorge Enrique Urbano, de 53 años, fue asesinado el domingo 8 de julio en el Puerto de Buenaventura, en el Pacífico colombiano, de cuatro disparos en momentos en que departía en un establecimiento con unos amigos.
Según las primeras investigaciones de la Unidad de Respuesta Rápida de la SIP se pudo determinar que el crimen se debio a razones de oficio.
Urbano se desempeñaba como director de la Emisora Mar Estéreo, afiliada a las emisoras Todelar. Realizaba un programa informativo que se caracterizaba por fuertes críticas a la situacion de inseguridad en el Puerto de Buenaventura.
El periodista era además gerente de la Corporacion Recrear, encargada del mantenimiento de las zonas verdes, la reubicacion de vendedores ambulantes y el desalojo de comerciantes de droga, por lo cual había recibido amenazas dos meses antes.
La SIP ha registrado en Colombia la cifra más alta de crímenes contra periodistas en el hemisferio occidental. Desde 1988 a la fecha han sido asesinados 100 comunicadores. Otros periodistas colombianos asesinados en los últimos nueve meses son: José Duviel Vásquez, Arquímides Arias Henao, Pablo Emilio Parra Castañeda, Yesid Marulanda Romero, Flavio Bedoya Tovar, Alfredo Abad Lopez, Guillermo Leon Agudelo y Gustavo Rafael Ruiz Cantillo.