Si bien en los asesinatos de los periodistas de Honduras y México existen dudas sobre si los móviles estuvieron ligados a la actividad periodística, la SIP insta a las autoridades de ambos países a investigar los casos con prontitud y eficiencia con el propósito de esclarecerlos para conocer las causas de los crímenes y deslindar responsabilidades.
Este artículo fue publicado originalmente en sipiapa.org el 15 de septiembre de 2017.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó preocupación por el asesinato de periodistas en Honduras y México; así como la situación de riesgo en la que se encuentra otro en Paraguay. La organización también destacó la condena contra el asesino de una reportera en Colombia.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Roberto Rock, manifestó que «la organización está atenta a situaciones de violencia y amenaza ocurridas en las últimas semanas en varios países de la región».
Rock, director del portal mexicano de noticias, La Silla Rota, explicó que «si bien en los asesinatos de los periodistas de Honduras y México existen dudas sobre si los móviles estuvieron ligados a la actividad periodística, instamos a las autoridades de ambos países a investigar los casos con prontitud y eficiencia con el propósito de esclarecerlos para conocer las causas de los crímenes y deslindar responsabilidades».
En Honduras fue asesinado el 13 de septiembre el periodista Carlos Williams Flores, quien laboraba en el Canal 22 y conducía el programa Sin pelos en la lengua, en el que cubría temas sobre irregularidades en el municipio. Desconocidos en motocicletas dispararon contra el periodista cuando éste regresaba a la ciudad de Cuyamel, en el departamento de Cortés. Una empleada del canal que lo acompañaba en ese momento resultó herida en el ataque.
De acuerdo a la prensa hondureña, Flores también era dueño de un salón de billar donde hace dos meses fue asesinado un policía, por lo que las autoridades investigan si existe alguna relación entre el crimen del periodista y el ocurrido en su negocio.
En México fue asesinado el 5 de septiembre Juan Carlos Hernández, colaborador del portal La Bandera Noticias. Hernández, de 29 años, fue atacado por sujetos que le dispararon cuando salía en la noche de su casa en el municipio de Yuririra, en el estado de Guanajuato. Medios locales informaron que el sitio de internet había denunciado amenazas.
Autoridades de Guanajuato consideran que el asesinato de Hernández, quien además de colaborar como fotógrafo y auxiliar de redacción en La Bandera Noticias era taxista, no estaría relacionado al ejercicio del periodismo.
En Paraguay, Rock destacó el caso del periodista Cándido Figueredo, corresponsal del diario ABC Color en la ciudad de Pedro Juan Caballero, localizada en la conflictiva zona conocida como la Triple Frontera donde también convergen territorios de Brasil y Argentina.
El 2 de septiembre un juez firmó la excarcelación de Felipe «Barón» Escurra, presunto narcotraficante apresado desde 2016 y quien hace seis años tramó el asesinato de Figueredo en represalia por la publicación de información en la que se le mencionaba.
Un informe oficial de un organismo de Brasil especializado en el combate al crimen organizado interceptó en 2011 «un diálogo entre Felipe Escurra Rodríguez (…) y José Marcelo Da Silva (detenido en la prisión de máxima seguridad de Campo Grande), en el cual el primero reclama que su nombre estaría saliendo mucho en los diarios, y que en razón de eso mandaría matar al periodista responsable, en este caso Cándido Figueredo, corresponsal del diario ABC Color, en Pedro Juan Caballero-PY», reveló el diario.
«Tememos por la seguridad de Figueredo», expresó Rock, tras añadir que desde 1995 el periodista cuenta con seguridad policial 24 horas al día tras sufrir varios atentados en retaliación por su cobertura informativa y por las continuas amenazas contra él y su familia.
Por otra parte, Rock consideró la sentencia en Colombia contra el autor material del homicidio de la periodista Flor Alba Núñez Vargas, «como un paso adelante en la lucha contra la impunidad, aunque falta identificar y juzgar a los instigadores del crimen». Recordó que la mayoría de los crímenes contra periodistas en Colombia permanecen sin esclarecerse.
El pasado 8 de septiembre fue condenado Juan Camilo Ortiz a 47 años prisión por el asesinato de Núñez Vargas, ocurrido el 10 de septiembre de 2015 cuando se dirigía a su sitio de trabajo en la estación de radio La Preferida Stéreo, en la ciudad de Pitalito, municipio del Huila.