(RSF/IFEX) – Tras Oscar Espinosa Chepe, Raúl Rivero y Edel José García Díaz, Jorge Olivera Castillo es el cuarto periodista independiente liberado en los últimos ocho días. Desde el 29 de noviembre de 2004, han quedado en libertad siete de los 75 disidentes detenidos en marzo de 2003. En Cuba, donde el Estado detenta el […]
(RSF/IFEX) – Tras Oscar Espinosa Chepe, Raúl Rivero y Edel José García Díaz, Jorge Olivera Castillo es el cuarto periodista independiente liberado en los últimos ocho días. Desde el 29 de noviembre de 2004, han quedado en libertad siete de los 75 disidentes detenidos en marzo de 2003. En Cuba, donde el Estado detenta el monopolio de la información, continúan detenidos 22 periodistas.
En un comunicado fechado el 30 de noviembre, RSF hacía un llamamiento a las autoridades de La Habana a asumir un compromiso real hacia la democracia, «renunciando al monopolio estatal de la información». Por otra parte, la organización pedía a la Unión Europea que mantenga relaciones privilegiadas con la disidencia y continúe condicionando sus relaciones con Cuba «a la mejora de la situación en materia de derechos humanos y libertades políticas» y al respeto al pluralismo democrático.
Olivera Castillo quedó en libertad el 6 de diciembre por razones de salud. Padece graves problemas gástricos y trastornos en la vista (glaucoma y hipertensión). «El era uno de los más enfermos entre los disidentes presos», ha declarado Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), a Agence France-Presse. «Puede ser que haya algunas excarcelaciones más en las próximas horas o días, pero no habrá una liberación masiva de presos de conciencia», ha comentado el militante de los derechos humanos.
Olivera Castillo, director de la agencia Habana Press, fue detenido en su domicilio de La Habana el 18 de marzo de 2003. Quince días más tarde fue juzgado, junto con otros tres periodistas, en un proceso sumario. Al considerar sus artículos para el sitio http://nuevaprensa.org y la revista española «Encuentro» como actos «contra la independencia nacional y la economía de Cuba» (Ley 88), le condenaron a 18 años de cárcel. Lo mismo que sus compañeros en el juicio, Olivera Castillo, de 41 años, reconocía los hechos, afirmando que quería ejercer «un periodismo sin censura al servicio de la verdad». En agosto de 2004 fue trasladado de la cárcel de Guantánamo (Este) a la de Agüica (provincia de Matanzas). Licenciado por el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), Olivera Castillo fue durante diez años redactor del informativo televisado. En 1992 estuvo detenido durante tres días, cuando intentaba salir de la isla clandestinamente. Fue entonces cuando se unió a la disidencia y posteriormente, en 1995, con otros dos periodistas, fundó la agencia Habana Press, que dirigía desde entonces.